Proyectos varados (y saqueados) tras el boom del ladrillo

La pujanza de los años de vacas gordas que vivió el sector inmobiliario dejó paso con la crisis a millones de euros atrapados que se visibilizan en amplias extensiones de suelo sin desarrollar, terrenos con carteles de urbanizaciones de ensueño que quedaron frustradas y viviendas en proyecto a medio construir.

Muchos de ellos han acabado siendo pasto de los saqueadores, que se aprovechan de la falta de vigilancia e iluminación para hacerse con materiales susceptibles de reventa.

No existen datos exactos del número de viviendas paralizadas en Aragón en la actualidad, pero en el entorno de Zaragoza se encuentran esqueletos de proyectos de futuro y algún escenario desolador.

Uno de los casos más llamativos es La Muela, donde se pueden ver varios de estos proyectos que quedaron en el camino. Uno de ellos, la urbanización Residencial Berlín, promoción que estaba terminada y lista para entregar, ha sido una auténtica cantera para los ladrones: "Se han llevado todo lo que podía tener algo de valor", dice el concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de La Muela, Héctor Carrera.

Persianas, marcos de ventanas, puertas, barandillas, cableado, inodoros o hasta los pavimentos de la zona de recreo infantil y las lamas del parqué.

En este caso, esta promoción, que obtuvo licencia de obras en la etapa en la que gobernaba María Victoria Pinilla, quedó paralizada porque se levantó sobre una antigua cabañera, por lo que "no se pudo inscribir en el registro", explica Carrera. La promotora, Nyesa, en su día arregló la cuestión con los propietarios y llevó al Ayuntamiento de La Muela a los tribunales, que fue condenado al pago de cuatro millones de euros. El Consistorio apeló y se está a la espera de una nueva resolución judicial.

Más de 500 viviendas

Aparte de este inmueble, con las particularidades que ha conllevado, en el entorno de La Muela son varios los edificios a medio construir por el mazazo de la crisis. "Calculamos que puede haber más de 500 viviendas paradas, algunos edificios solo tienen la estructura y otros están más avanzados -explica Carrera-. En algunos casos la empresa quebró y ahí se quedó la obra, y en otros el constructor ha parado y está a la espera de poder retomarla".

No existen cifras oficiales del número real de viviendas a medio construir en Aragón. Según los últimos datos del Ministerio de Fomento, en diciembre de 2013 Aragón tenía 16.546 viviendas nuevas en stock. De ellas, 10.213 se encontraban en la provincia de Zaragoza, 3.007 en Huesca y 3.326 en Teruel. En la actualidad, se ultiman los nuevos informes con datos más actualizados, que se conocerán próximamente, unas cifras que no diferencian entre las viviendas totalmente terminadas o paralizadas.

Desde la Federación de Empresas de la Construcción de Zaragoza, su presidente, José Luis Roca, estima que "el de las viviendas en estructura no es el mayor problema que existe en Aragón", y subraya que la Comunidad Autónoma tiene "más stock en suelo que en vivienda".

En términos económicos, los constructores calculan "que en estos momentos el sistema financiero español, incluyendo a SAREB, tiene atrapado en Aragón entre 5.000 y 7.000 millones de euros, tanto activos financieros como activos inmobiliarios, pero no se puede discernir cuánto es suelo y cuánto vivienda", explica Roca, quien subraya que "así es difícil que el crédito pueda fluir, y esto eso es un serio 'handicap' para la economía aragonesa en general, porque no se pueden financiar a otros sectores productivos".

Por su parte, desde SAREB explican que "en Aragón el mayor stock que hay es suelo", y que de los 106.800 inmuebles que llegaron al SAREB en 2012, -que incluye activos de todo tipo, como viviendas, suelo, fincas, industrial, garajes, trasteros, etc.-, el 2,4% correspondía a la Comunidad Autónoma.