La Fundación Tarazona Monumental acaba de poner en marcha el segundo taller de empleo en el antiguo convento de San Joaquín, un edificio de propiedad municipal.

Durante los próximos seis meses, dieciséis alumnos-trabajadores se especializarán en albañilería y carpintería.

"La verdad es que la sensación, ya desde el proceso de selección, es de un gran grado de satisfacción, sobre todo teniendo en cuenta que se generan muchas ilusiones, sobre todo de los alumnos-trabajadores.

El que la gente adulta, mayores de 25 años, pueda formarse y tener un contrato durante seis meses, yo creo que es un motivo de alegría”, afirma el gerente de la Fundación, Julio Zaldívar.

El taller está financiado conjuntamente por Tarazona Monumentual y el Gobierno de Aragón a través del Instituto Aragonés de Empleo (INAEM) y tiene una aportación total que supera los 260.000 euros, de los que Tarazona Monumental tiene previsto aportar alrededor de 80.000 euros.

El Ayuntamiento de Tarazona colabora en la cesión de las naves municipales, la maquinaria y las aulas donde los alumnos reciben las clases teóricas y ejecutan las primeras prácticas antes de trasladarse a la obra.

El estado de conservación del antiguo convento de San Joaquín viene marcado por el mal estado de sus cubiertas y por la falta de un uso continuado que procure su buen mantenimiento.

“Hay alguna zona mala pero en general está en buen estado, perfectamente rescatable con poca inversión”, asegura Joseba Iturrate, director del taller de empleo.

“Es un proyecto a medio-largo plazo y en su momento el Ayuntamiento planteará cuáles van a ser los usos del edificio pero ahora por el momento estamos ejecutando intervenciones de urgencia para salvaguardarlo”, añade Zaldívar.

En los próximos meses se va a actuar en la zona sureste de la cubierta, encima del claustro y en todo el tejado que da a la calle San Antón, ya que es la fachada que se va a arreglar.

“Con esto quedaría la parte central del convento solucionado, faltaría el ala del lavadero que presenta bastantes problemas, pero para poder trabajar en esa zona primero habría que sujetar una pared maestra y desescombrar unas ruinas que hay ahí”, indica Iturrate.

Los alumnos completarán un total de 920 horas de formación entre teoría y práctica, y al finalizar recibirán certificados profesionales en cada sección. “Hay que enseñarles desde cero.

Lo que vamos a hacer es repicar fachadas, enfoscar, montar material de carpintería en las fachadas, y aislar el tejado con el sistema de autosustentación de las tijeras”, explica el director del taller.

Es el quinto taller de empleo que promueve la Fundación Tarazona Monumental. “Estamos muy contentos al ver el resultado de años anteriores, ya que han ido sumando por la mejora de nuestro patrimonio, lo que sirve para que venga más turismo y regenerar la economía sostenible sobre todo en el sector servicios”, finaliza Zaldívar.