Educación

Cientos de erasmus aragoneses pierden parte de su beca con el curso ya iniciado

El Ministerio solo mantendrá su parte de la ayuda a los estudiantes que el año pasado tenían una beca general, por lo que muchos beneficiarios de la Comunidad se han enterado ya en el extranjero de que recibirán poco más de 100 euros.

Adrián Llosá, bajo la primera nevada del invierno en Tampere, Finlandia.
Cientos de 'erasmus' aragoneses pierden parte de su beca con el curso ya iniciado

Cientos de universitarios aragoneses que se encuentran repartidos por toda Europa gracias a las becas Erasmus han recibido estos días una noticia que les ha indignado tanto como preocupado. Con el curso ya comenzado y cuando ya estaban en sus países de destino, el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte ha publicado una orden en el BOE con la que retira, sin previo aviso, la aportación complementaria que realizaba el Estado para completar la cuantía que asigna a cada estudiante el Organismo Autónomo de Programas Educativos Europeos (OAPEE).


La medida no afecta a todos los aragoneses beneficiarios de estas ayudas, ya que se salvan aquellos que el año pasado recibieron una beca general del Ministerio, pero sí reduce a mínimos la cuantía que recibirán la mayoría de los estudiantes de la Comunidad. En caso de que no reciban ayudas autonómicas o de instituciones privadas, los damnificados por esta medida contarán con solo 115 euros mensuales para sufragar todos sus gastos en el extranjero, frente a los 215 que recibirían antes de la modificación.


La Universidad de Zaragoza todavía no ha cuantificado cuántos de sus estudiantes podrían perder esta ayuda, ya que hasta el final del curso no se conoce el número exacto de participantes en este programa europeo -también hay becas de varios meses para el final del curso-. Sin embargo, teniendo en cuenta que cada año son unos 900 los universitarios -en el curso 2011/12 fueron 886 y el pasado unos 950- de la pública que salen a formarse al extranjero, todo hace indicar que el número de afectados se contará por centenas. Por si fuera poco, a los 'erasmus' de la Universidad de Zaragoza habría que sumar varias decenas más de la Universidad San Jorge.


Pero la decisión del departamento dirigido por Wert no solo ha causado indignación por las consecuencias económicas, sino que además estos universitarios se han sentido engañados, ya que la inmensa mayoría ya se habían marchado sin conocer el nuevo requisito. Un dinero con el que ya contaban y que podría complicar la estancia en el extranjero de más de uno. Este cambio de última hora ha provocado las críticas del Consejo de Estudiantes de la Universidad de Zaragoza y los alumnos que actualmente se encuentran fuera estudiando con una beca Erasmus. “Habrá gente que quizás hasta tenga que volver, ya que contaban con unos ingresos que ahora no van a recibir”, indica Rafael Rubio, presidente de este órgano de representación de los universitarios.


"Los anteriores años fui beneficiario de la beca general en España, pero justo el año pasado no, ya que tuve que compaginar los estudios con un trabajo y bajó mi rendimiento", asegura David Padules, un zaragozano de 22 años que cursa el último año de Historia en la Universidad de Toulouse II-Le Mirail: "Ahora me veo con una beca reducida a 115 euros al mes, lo que no da para mucho, ni en Francia ni en ninguno de los países con los que hay convenio. Los gastos en una ciudad extranjera son muchos: alquiler, comida, material académico, trasporte, viajes de ida y vuelta a España... En definitiva, como en mi caso, la mayoría tenemos que pagarnos prácticamente todo de nuestro bolsillo".


Los aragoneses afectados son muchos, de diferentes partes de la Comunidad y de distintas carreras, pero las sensaciones con las que se han quedado tras conocer la noticia son similares. "Tras dos meses de dudas sobre el terreno, por fin el ministro Wert ha mostrado sus intenciones, y coloca en una difícil situación a estos estudiantes que ven como su sueño Erasmus puede desvanecerse en cuestión de días. Esperábamos un recorte, para qué negarlo, pero uno nunca cree que el lobo pueda acabar con toda la manada", asegura Adrián Llosá, estudiante de cuarto curso de Administración y Dirección de Empresas en la localidad finlandesa de Tampere: "O con casi toda, porque unos pocos se salvan. Un pequeño grupo de alumnos tendrá la beca porque por supuesto, no es lo mismo eliminar una ayuda que endurecer las condiciones de acceso. ¡El Gobierno no es tan malo, hombre!", ironiza Llosá.


El sentimiento de indignación de los 'erasmus' aragoneses recorre todo el continente, desde Finlandia a Inglaterra, pasando por Italia o Francia. "Ha sentado muy mal, porque se aplica a gente que ya está de Erasmus. Es una forma de eliminar el programa: muchos no pueden beneficiarse, ya que la ayuda es muy pequeña", critica Laura Beltrán, alumna de Historia en la Universidad de Zaragoza que estudia en la Universidad Jules Verne de la ciudad francesa de Amiens.


100 euros menos al mes

Hasta ahora, los alumnos recibían del Gobierno una ayuda complementaria dotada con unos 100 euros mensuales -durante un máximo de ocho meses- que se aumentaba a 185 euros si el año anterior había disfrutado de una beca general del Ministerio. De esta forma, mientras los que no tuvieron esta última ayuda perderán estos 100 euros, en muchos casos la mitad de la cuantía que tenían previsto recibir, los que fueron becarios en el curso 2012/13 podrían recibir ahora, según la orden del BOE, hasta un máximo de 300 euros mensuales, “en función del número de alumnos que finalmente resulten beneficiarios de la ayuda y de acuerdo con las disponibilidades presupuestarias”.


Los más afortunados podrían completar sus ingresos con algunas de las becas que conceden algunas empresas o instituciones de carácter privado, mientras que alrededor de dos centenares de estudiantes de la Comunidad se benefician de las ayudas del Gobierno de Aragón. Según aseguró ayer mismo la consejera de Educación, Dolores Serrat, su departamento mantiene "el que era nuestro compromiso, nuestros complementos y nuestras aportaciones, sin ningún tipo de modificación". Las subvenciones a las que se refiere, y que de momento quedan intactas, son los 250 euros mensuales -durante un máximo de seis meses- a los universitarios que cumplen una serie de requisitos académicos y económicos.


El Gobierno se justifica

Por su parte, el Ministerio de Educación ha asegurado que la condición de haber sido beneficiario de una beca general universitaria el curso pasado para poder obtener en éste el complemento a las Erasmus pretende "garantizar" que la aportación llegue a los estudiantes "con más bajos ingresos".


"Es significativo que en los dos últimos años ha habido bastantes renuncias a las ayudas de los fondos europeos por parte de estudiantes que habían sido seleccionados por no contar con medios económicos suficientes", ha asegurado el departamento dirigido por José Ignacio Wert en una nota, en la que subraya que el Gobierno trabaja para lograr que el acceso a las becas Erasmus se produzca "en un contexto de igualdad de oportunidades". Por ello, agrega, mantiene el componente adicional ligado a la renta de los beneficiarios, pero "prescinde de ayudas lineales que no responden a necesidades económicas de los estudiantes".