La Universidad de Zaragoza está diseñando para los próximos cursos alrededor de una decena de nuevas titulaciones académicas que pasan por la oferta de cuatro dobles grados y, como mínimo, otros cuatro másteres o titulaciones propias (que podrían ser cinco), de cara a hacer su propuesta universitaria más «diferenciada, atractiva y de calidad».

Así lo avanzó ayer el rector de la institución, José Antonio Mayoral, que compareció en la Comisión de Innovación, Investigación y Universidad de las Cortes de Aragón para informar sobre la situación presente y las perspectivas de futuro de la Universidad.

Mayoral explicó que se está trabajando en estas nuevas propuestas que, en este momento, se encuentran en diferentes fases de concreción. Así, avanzó que el nuevo grado que saldrá de la unión de Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural (que ahora se imparte en Huesca) con Ciencia y Tecnología de los Alimentos (que se da en el campus de Zaragoza) es el que está más adelantado. Mayoral apuntó que, probablemente, no será un doble grado al uso sino una titulación «consecutiva» y aseguró que confían en ofertarlo para el curso académico 2018-2019.

Con un horizonte temporal a más largo plazo, pero ya con propuestas y equipos trabajando en ellas, se perfilan otras tres titulaciones: la que uniría el grado de Ciencias de la Salud y del Deporte (Huesca) con Nutrición y Dietética (Huesca) o con Fisioterapia (Zaragoza), para formar un grado doble; y además, en Teruel, señaló el rector, se han retomado dos titulaciones conjuntas: Psicología con Magisterio e Ingeniería Informática con Administración y Dirección de Empresas.

Cambios en la formación

En cuanto a másteres y otras titulaciones, Mayoral citó expresamente cuatro propuestas: la más avanzada de todas ellas es la dedicada a los Drones, que el campus de Teruel está preparando conjuntamente con la Universidad Carlos III y el aeropuerto. Mayoral explicó que, en principio, podría salir como título propio de la Universidad de Zaragoza o como diploma de especialización, pero con la idea de que a futuro pudiera ofertarse como master oficial. Asimismo, está también muy adelantado el diseño de una titulación propia de Big Data, que requerirá del concurso de la Facultad de Ciencias e Ingenieros.

Por último, mencionó otras dos titulaciones que, al plantearse conjuntamente con centros académicos europeos, están aún en las fases iniciales de definición. Se trata de Agricultura ligada a las Nuevas Tecnologías, que comenzaría su andadura como título propio, en la que están trabajando el campus Iberus junto con la Escuela de Agronomía de Burdeos. Y otra, como propuesta de master, de Economía Circular, que estaría diseñándose entre Iberus y universidades europeas.

También mencionó la posibilidad de presentar a futuro una titulación en el campus de Teruel que una Bellas Artes con Informática. Esta propuesta es aún más un deseo del propio rector que un planteamiento formal, pero Mayoral aseguró que «ligar la creación artística con la digital puede resultar atractivo y diferencial».

El rector de la Universidad de Zaragoza fue prudente a la hora de definir plazos y adelantar en qué cursos podrían ofertarse estas titulaciones académicas, pero fue contundente al asegurar que «este es el futuro». «El tiempo de la superespecialización ha pasado; ya no tiene sentido –dijo–. La superespecialización de hoy es la nada para mañana».

Mayoral explicó a los diputados autonómicos que el futuro pasa por «modular la oferta académica a lo largo de toda la vida de la persona. Y esto significa tener una formación sólida inicial porque uno nunca sabe en qué va a terminar trabajando, y especializarse con titulaciones o másteres de gran calidad, que complementen la formación del grado, porque esto es lo que va a dar el valor diferencial».

Caída de ingresos

Además de la oferta académica, el rector habló en las Cortes de Aragón del presupuesto de la institución. Mayoral mencionó que la rebaja de las matrículas de los grados decidida este año había supuesto una reducción de ingresos para al Universidad cercana a 1.200.000 euros. Esta caída no ha tenido efectos sobre la política de becas de la institución gracias al contrato programa de 600.000 euros suscrito con la DGA, según explicó el rector.

En cuanto al presupuesto de 2018, avanzó que, en virtud del pacto firmado con el Gobierno de Aragón, se incrementará en 3,5 millones, aparte de lo comprometido para Filosofía.