La paternidad no siempre es sencilla. Los progenitores, en ocasiones, tienen que hacer cabriolas para satisfacer las demandas del bebé, que en el momento menos oportuno exige comer, beber, que se le ponga o quite ropa de abrigo... o un urgente cambio de envoltorio porque el biberón de hace solo un rato ya ha completado el recorrido digestivo.

La sustitución del pañal es uno de esos momentos críticos. Puede tocar en casa, pero también en mitad de la calle, donde no siempre hay una instalación propicia a mano en la que llevar a cabo la tarea. Por eso, el Ayuntamiento de la capital aragonesa tiene previsto instalar 42 cambiadores para bebés en espacios públicos municipales.

Esta semana se ha abierto el proceso de licitación. El contrato con la adjudicataria comprende tanto los propios cambiadores como su instalación, incluyendo el atornillado ya sea directamente sobre las paredes de ladrillo como sobre chapa metálica sujeta a las paredes de yeso.

Los pliegos subrayan que "las entidades licitadoras han de utilizar un lenguaje e imágenes no sexistas en toda la documentación, publicidad, imagen o materiales que se generen durante la ejecución del contrato".

Según explican fuentes del Consistorio, estas nuevas herramientas están proyectadas para “lugares de especial tránsito y uso público como centros deportivos, equipamientos sociales y culturales, espacios como la Casa de la mujer… pero también en espacios administrativos como la propia casa consistorial”.

“Se ha solicitado a los responsables de equipamientos que informen sobre las necesidades reales de más cambiadores para bebes en los equipamientos de los que son responsables. A la vista de las solicitudes presentadas por los responsables de equipamientos y del presupuesto disponible se han seleccionado un total de 35 edificios”, apuntan los pliegos.

Desde el Consistorio se aclara que para los cambiadores “se intentan buscar ubicaciones discretas y, a poder ser, en un tercer espacio distinto a los baños masculinos y femeninos”.

Para poder dotar a todos los edificios municipales que los puedan necesitar de cambiadores se ha consignado una partida presupuestaria en el presupuesto de 2017 por un importe total de 20.000 €.

Estaciones y aeropuertos

La Comisión para las Políticas Integrales de Discapacidad del Senado aprobó esta semana una iniciativa para adecuar los baños de estaciones de tren y de las terminales de aeropuertos y puertos de forma que las personas con movilidad reducida puedan cambiar los pañales a sus bebés.

Lo ha hecho al dar luz verde a una enmienda presentada a una moción del PSOE, que tuvo el apoyo de todos los grupos parlamentarios, salvo Unidos Podemos-En Comú-En Marea, que se ha abstenido. En concreto, el texto aprobado insta al Gobierno a que los baños de esas infraestructuras tengan cambiadores adaptados a las personas con movilidad reducida para que puedan cambiar los pañales a sus bebés, pero también a los niños más mayores -a partir de un determinado peso- y a los adultos que tengan limitaciones en su movilidad.