"No sabemos cuándo saldrá el vuelo y no podemos comprar otros billetes"

Las zaragozanas María Pereira y su hija Valeria, de tres años, llevan desde este lunes esperando poder regresar a España.

María y Valeria en el aeropuerto Simón Bolívar de Caracas.
María y Valeria en el aeropuerto Simón Bolívar de Caracas.
M. P.

María Pereira y su hija Valeria, de tres años, no regresarán a España este jueves. Desde que este lunes la aerolínea venezolana Conviasa suspendiera su vuelo desde Caracas a la capital española, María y su hija se encuentran 'atrapadas' en el aeropuerto internacional Simón Bolívar. 

El pasado 14 de abril, María viajó a Venezuela, su país natal, junto a su hija pequeña, para visitar a su madre enferma. María, casada con un zaragozano, lleva 9 años viviendo en la capital aragonesa y ha tenido dos hijas.

"Anoche me llamó mi mujer desesperada. Han vuelto a mandar a los pasajeros al hotel y les han dicho que el vuelo previsto para este jueves finalmente no saldrá", comenta Daniel Morales, el marido de María.

"Iberia y otra compañía venezolana siguen volando a España pero en este momento no podemos pagar los más de 1.000 euros que costarían unos nuevos billetes", explica resignado ante el retraso de la llegada de su mujer y su hija a nuestro país.

"Me he puesto en contacto con un abogado para que me informe sobre qué podemos hacer. También he llamado más de 100 veces al Ministerio de Exteriores pero no he conseguido hablar con nadie", indica Morales sobre las gestiones que está realizando desde Zaragoza.

"No sabemos cuándo saldrá el vuelo", concluye el marido de María, preocupado por el  estado de su mujer y de su hija pequeña, quienes en estos momentos se encuentran alojadas en un hotel de la capital venezolana a la espera de recibir más información de la aerolínea.

María, que el pasado 14 de abril viajó hasta Barinas, su ciudad natal, para visitar a su madre enferma, lleva viviendo 9 años en la capital aragonesa, está casada con un zaragozano y ha tenido dos hijas. La pequeña, de tres años, espera con ella un vuelvo para regresar.

La aerolínea estatal venezolana Conviasa, propiedad del ministerio del Poder Popular para el Transporte Terrestre de Venezuela desde 2012, con la que tenían contratado el viaje, ha tenido que suspender varios vuelos a Madrid y Buenos Aires este mes al quedarse sin aviones por no pagar las cuotas de alquiler.

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