"Cuando vi a Noa en el agua no me lo pensé dos veces"

Sergio Martínez, zaragozano de 33 años y su perra Noa de tres, vivieron en la tarde de este domingo una de las experiencias “más traumáticas de su vida”. Mientras iban paseando por el Parque Lineal de Plaza, junto al Canal Imperial, Noa saltó al agua sin que su dueño se percatara.

La tensión de ver a su mascota ahogándose y sin poder salir hizo que Sergio decidiese lanzarse a rescatarla, llegando a nado hasta ella, para posteriormente encaramarse ambos “a la rama de un tronco”, tal y como confirma Sergio Martínez y permanecer en el agua hasta que los bomberos, a quienes dio aviso su mujer, pudieron llegar a rescatarles.

“Cuando ví la perra en el canal llorando y chapoteando en el agua sin poder subir no me lo pensé dos veces. Dejé el móvil en la orilla para que lo cogiese mi mujer y me lancé”, argumenta Sergio Martínez, quien asegura que comenzó a ponerse nervioso cuando notó que comenzaba a congelarse. “Cuando vi que los bomberos llegaban me tranquilicé. Hasta entonces sí lo pasé mal”, apunta el dueño de Noa.

El tiempo que allí pasaron –“aproximadamente unos quince minutos”, dice el dueño de Noa-, provocó que Martínez sufriese un principio de hipotermia. “Al principio no sentía nada, solo pensaba en sacar a la perra. Me dio el bajón cuando nos rescataron. Si no llegan los bomberos, no hubiéramos salido”.

Afortunadamente tanto Noa, adoptada por Sergio Martínez, como su dueño se encuentran en perfecto estado de salud en su domicilio. “Quiero agradecer a los bomberos, Policía Local y enfermeras del Hospital Militar su trabajo. Se portaron muy bien con nosotros”, dice el zaragozano, quien asegura que “nunca más volverá a pasear con su perra por el canal”. “Mi mujer nos lo ha prohibido”, concluye.