El comité de empresa de Autobuses Urbanos de Zaragoza SA (Auzsa) amenaza con emprender un nuevo calendario de paros en Navidad si la plantilla los aprueba el miércoles en referéndum. Así lo hizo ayer público su presidente, Javier Anadón, quien detalló en un comunicado los cuatro "incumplimientos de convenio" que pueden provocar las movilizaciones, que se debatirán a lo largo de hoy en asamblea antes de votar si se convocan los paros parciales del 27 de diciembre al 8 de enero "o se toman otro tipo de medidas". La última huelga acabó hace ocho meses y fue la más larga de la historia, provocando una caída de usuarios a lo largo de cuatro meses de la que aún no se ha recuperado la compañía.

Anadón lamentó que la empresa lleva tres meses sin citar a la comisión de coordinación del convenio, a pesar de que su periodicidad es mensual. La situación la ha denunciado ante la Inspección de Trabajo y la ha puesto en conocimiento del equipo de gobierno municipal de ZEC, que mediará para intentar que los ciudadanos no vuelvan a sufrir las consecuencias de la conflictividad laboral de Auzsa.

El comité de empresa lamenta que la falta de interlocución impida que los conductores dispongan ya de un calendario de descanso, que les garantice para el próximo año un mismo porcentaje de libranzas en días laborables y fines de semana.

También cuestiona que no se les hayan entregado las llaves de los aseos instalados en los finales de línea, cuyo retraso achacan a la empresa "a pesar de que desde el Ayuntamiento ya se les dio orden para ello". Igualmente, cuestionan que aún no se hayan adecuado los cuadros de marcha que deben cumplir los conductores a los tiempos de recorrido necesarios para completar los recorridos de las líneas y "poder cumplir las frecuencias establecidas por el Ayuntamiento".

Además, exigen más contrataciones en talleres para evitar que los trabajadores deban hacer horas extra para atender la demanda de reparaciones de la flota. "Y en cuanto a descansos semanales, no se cumple el convenio".

La concejala de Movilidad, Teresa Artigas, aseguró ayer a este diario que el comité de empresa había solicitado una reunión y le trasladó su malestar con la empresa, aunque desconocía que los paros estuvieran ya previstos para las próximas navidades si así lo respalda la plantilla el miércoles en referéndum.

Artigas adelantó que desde el Ayuntamiento van a mediar para evitar que los ciudadanos vuelvan a padecer afecciones en la oferta de transporte público. "Vamos a hacer lo que esté en nuestra mano para resolver la situación", dijo.

La edil de ZEC pretende reunirse en los próximos días con las partes y requerir a la empresa para que facilite a los conductores de autobús las llaves de los cinco aseos que ya están listos en las terminales de línea, tal y como se comprometió la empresa en la última reunión tripartita celebrada hace un mes.

La empresa guarda silencio

Mientras tanto, la dirección de la concesionaria del transporte público de Zaragoza optó por guardar silencio, aunque hoy pretende dar respuesta a los acusaciones de los trabajadores.

La realidad es que la propia concejala de Movilidad detalló que cinco de los catorce aseos previstos en los finales de línea están listos y otros cuatro se encuentran en obras y podrían prestar servicio a finales de año, la última fecha comunicada a las partes. Eso sí, la necesidad de disponer de los preceptivos permisos de acometidas alargará el proceso en otros cinco, que aún se encuentran en la fase administrativa previa.