El Supremo confirma la pena de 46 años de cárcel para los asesinos del camionero de Plaza

Mataron al transportista e hirieron gravemente a un amigo para robarles lo que acababan de ganar en un salón de juegos.

El Supremo confirma la pena de 46 años de cárcel para los asesinos del camionero de Plaza
El Supremo confirma la pena de 46 años de cárcel para los asesinos del camionero de Plaza
Heraldo

El Tribunal Supremo ha confirmado íntegramente la condena de 46 años de prisión que impuso en su día la Audiencia Provincial de Zaragoza a Noé Arteaga y Alberto Rus, ambos vecinos de La Almunia, por el asesinato del camionero portugués José Manuel Fernandes y las graves lesiones causadas al también transportista Antonio Manuel Cabrita. Los acusados asaltaron y golpearon con barras de hierro a las víctimas con la intención de robarles los 3.000 euros que uno había ganado en las máquinas de un salón de juegos del centro comercial Plaza Imperial.


La Audiencia impuso a cada uno una pena de 15 años de cárcel por el asesinato de Domingues y cuatro por las lesiones a Cabrita. Además, condenó a Noé Arteaga a otros cuatro años y medio por el robo, aunque a Rus se la dejó en tres y medio atendiendo a una leve merma de su capacidad intelectiva volitiva de carácter leve, que le hace ser "fácilmente influenciable por terceros".


Los dos camioneros coincidieron en la explanada de Plaza con sus vehículos la tarde del 10 de abril de 2014 y, obligados a descansar por motivos de su trabajo, decidieron cenar en el centro comercial y jugar en un casino. A pesar de que les sonrió la fortuna y les tocaron premios superiores a 6.000 euros, la mala suerte quiso que Noé Arteaga, que se había gastado ya todo su dinero, estuviera presente en ese momento. Este hombre, de 32 años y con tres condenas anteriores por robo con fuerza, pidió dinero a Cabrita, que le dio 10 euros con la condición de que se marchase. Arteaga accedió, pero lo que hizo fue irse hasta La Almunia, buscar a Alberto Rus y tramar un plan para quitarles todas las ganancias. Así, tras hacerse con dos barras de hierro, volvieron al lugar, esperaron a que salieran del local, y, ya de madrugada, en la pasarela de Plaza, con la cabeza cubierta con unas mangas cortadas de camiseta, les atacaron salvajemente con el resultado ya conocido.


Ambos acusados recurrieron el fallo. Arteaga alegó que él solo golpeó Cabrita y que fue Rus quien se encargó de Fernandes. Pero el Supremo, como ya hizo la Audiencia, los considera coautores del asesinato. También les mantiene las agravantes de alevosía y disfraz y cree "irrelevante" los 1.000 euros que Arteaga adelantó como pago de la indemnización de 470.000 euros que les impuso el tribunal para resarcir a las familias de las víctimas.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión