Le dejan 237.537 € para curarse en Houston y se los gasta en tragaperras

La Audiencia juzga a una vecina de Alagón para la que la Fiscalía pide 3 años de cárcel por dejar en la ruina a un matrimonio.

Máquinas tragaperras
Máquinas tragaperras.

La Audiencia Provincial sentó ayer en el banquillo de los acusados a Antonia María I. H., una vecina de Alagón para la que la Fiscalía pide tres años de cárcel por aprovecharse, presuntamente, de la desmedida bondad de un matrimonio hasta llevarlo a la ruina. Según las acusaciones pública y particular (que eleva la petición de prisión a seis años), la mujer les engañó e hizo creer que tenía un tumor cerebral que solo podría superar sometiéndose a un caro tratamiento en Houston (Estados Unidos). La pareja, pensando que con su dinero podía ayuda a salvar la vida de esta persona, le entregó al menos 237.537 euros. Dinero que, como ella misma confesó después ante la Policía, dilapidó en parte en casinos, bingos y tragaperras.


Durante su declaración, uno de los perjudicados explicó al tribunal que fue su propio hermano quien les presentó a la acusada a finales de 2008. "Nos dijo que era amiga suya y que necesitaba el dinero urgentemente para el tratamiento, así que le prestamos los primeros 25.000 euros para que se los diera", contó el hombre. Pero a esa entrega inicial sucedieron muchas otras, bien en mano o mediante transferencias. "Hasta el punto de que cuando se agotaron todos nuestros ahorros pedimos dinero para ella a varios amigos, con los que todavía tenemos deudas", precisó.

El hijo contrató un detective

Según los denunciantes, llevados por su "buena fe", estuvieron pasando dinero a la acusada hasta 2015, cuando por fin contaron lo que ocurría a su hijo y les hizo ver que aquello no era normal. "Nosotros mismos sospechábamos, pero ella nos dijo que solo nos podría devolver nuestro dinero cuando vendiera un piso que tenía en el Actur", explicó la pareja. "Es más –añadió-, nos dijo que si la denunciábamos no cobraríamos nunca nada".


Al ver que sus padres ya no tenían ni para comer y no lograban recuperar su ahorros, el hijo contrató los servicios de dos detectives, que fueron quienes descubrieron que la acusada había mentido hasta al dar su nombre, puesto que no se llamaba Laura –como les había hecho creer– sino Antonia María. Después supieron que ni estaba enferma ni tenía ninguna vivienda a su nombre, lo que les llevó a presentar una denuncia por estafa ante la Policía.


Preguntada por su supuesta enfermedad, Antonia María I. H. declaró ayer que "nunca" dijo sufrir ningún cáncer. "Yo necesitaba el dinero y ellos me los dejaron en concepto de préstamo. Sin más", indicó. La mujer negó también haber recibido cantidades en metálico y solo reconoció las entregas efectuadas vía transferencia: "unos 40.000 o 50.0000 euros", puntualizó.


Quien también declaró ayer como testigo fue el hermano del denunciante, quien desdijo a este último y afirmó que ni le pidió nunca dinero para su amiga ni le reveló que sufriera un tumor cerebral. El testimonio dejó perplejos a sus familiares, que tuvieron que contenerse al verlo pasar ante ellos sin dirigirles la mirada.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión