El ropero solidario de Valdespartera comienza a llenarse tras el verano

En torno a 20 bolsas de ropa son recogidas semanalmente en este particular ropero que tiene su espacio en el Centro Vecinal del barrio.

Las prendas se almacenan en el centro vecinal de Valdespartera.
El ropero solidario de Valdespartera comienza a llenarse tras el verano
El ropero solidario

El pasado sábado era el primero tras el verano en el que el ropero solidario de Valdespartera volvía a abrir sus puertas, y seis familias no quisieron esperar para hacer llegar sus bolsas de ropa hasta el centro vecinal del barrio zaragozano. Camisetas, abrigos, vestidos, pantalones, chaquetas, camisas, pijamas y todo tipo de prendas de vestir, además de calzado, ocupan más de una decena de armarios en uno de los espacios del edificio vecinal. También hay cajas y percheros que ayudan a almacenar todas las donaciones recibidas.


Después de algo más de seis meses de vida, una media de entre 20 y 25 bolsas de ropa son recogidas semanalmente en este particular ropero, que fue puesto en marcha por la Asociación Vecinal Los Montes de Valdespartera y que funciona gracias a la labor de ocho voluntarios del barrio que, cada sábado, de 10.30 a 12.00, recolectan, clasifican y organizan todas las prendas. Esta ropa viaja en furgonetas hasta diferentes entidades sociales, además de destinarse a personas necesitadas en la ciudad. Así, la solidaridad de los vecinos de los barrios del sur ya ha alcanzado a familias de Torrero, San José, el Actur o Las Delicias a través de esta iniciativa.


“Como los vecinos nos nutren de prendas todas las semanas, las entidades saben que disponemos de ropa y, si en un determinado momento, necesitan urgentemente prendas concretas para niños, se ponen en contacto con nosotros”, cuenta Lorena Gregorio, representante de la asociación vecinal, quien apunta que suelen trabajar con familias controladas, ya sea por parte de la Administración  o a nivel asociativo.


El balance de la actividad de este particular ropero es, hasta ahora, positivo. “Estamos muy contentos con la respuesta ya que la gente del barrio y del distrito está donando mucha ropa y su salida es bastante rápida: aguantamos hasta llenar los armarios del centro y nos ponemos en contacto con los diferentes implicados, que vienen a buscarla”, relata Lorena Gregorio. Como ejemplo, el ropero quedó desocupado a finales de junio y en prácticamente dos semanas tuvo que ser vaciado de nuevo: “Nos estaban dejando las bolsas de ropa en la puerta”, recuerda la representante.


El grueso de las donaciones, que suelen presentar muy buen estado, cobra forma de prendas de mujer, mayoritariamente joven, así como de niño y bebé, aunque en ocasiones también han recibido carros de paseo, sábanas, bolsos, bañeras infantiles e incluso algún traje de comunión. Ahora, tras la época estival, la ropa de verano ya ha comenzado a llenar las diferentes estanterías y armarios en el centro vecinal.


Entre sus propósitos, los responsables del proyecto tienen previsto reunirse con el Ayuntamiento de Zaragoza con el objetivo de proponer que el ropero solidario sea tenido en cuenta como punto de recogida al que remitir a las personas necesitadas en determinados casos, además de para ampliar la visibilidad de la iniciativa y su implicación en el resto de la ciudad.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión