Dosis de solidaridad para afrontar la vuelta al cole

El grupo en redes sociales ‘Mamás ante la crisis’ de Zaragoza lleva a cabo estos días una campaña de recogida de material escolar.

Parte del material recogido durante la campaña 'Mamás ante la crisis'
Parte del material recogido durante la campaña 'Mamás ante la crisis'

Ilusión, nervios, expectación... La vuelta el cole lleva implícitos sentimientos de todo tipo en los más pequeños, pero también implica unos cuantos movimientos en los bolsillos de los mayores. La ropa, el material escolar, los servicios de transporte o las actividades extraescolares son algunos de los gastos que suponen un esfuerzo económico para muchas familias en el mes de septiembre.


Hay diferentes formas de echar una mano a quienes necesitan una ayuda para asumir esos costes y algunas de ellas están directamente vinculadas a las redes sociales. Como ejemplo, el grupo de Facebook  ‘Mamás ante la crisis’ de Zaragoza, que a mediados de agosto puso en marcha una campaña de recogida de material escolar que ayudará, al menos, a  30 niños de 17 familias diferentes.


Aunque ya habían organizado campañas para Navidad, es la primera vez que lo hacen en la vuelta al cole. “Comenzaron a llegarme unos cuantos mensajes de personas que preguntaban si podíamos ayudarles con estos materiales de cara al inicio del curso, y nos decidimos a realizar la campaña. Aunque empezamos algo tarde, la cantidad de personas que se han implicado es altísima”, cuenta Noelia García, una de las administradoras del grupo y responsable de la iniciativa.


En prácticamente quince días recogieron 20 estuches, 70 lapiceros y otros tantos bolígrafos, 40 cuadernos, 30 mochilas, 30 gomas, 35 sacapuntas y 30 cajas de pinturas, pero desde la organización de la campaña afirman que todavía hay que sumar a esas cifras muchas cosas que quedan por recoger, comprar o trocar. No han solicitado libros porque, aseguran, es un tema más complejo, pero también han recibido reglas, rotuladores, folios, carpetas, pegamentos, y hasta batas infantiles y bolsas para el almuerzo.


Este grupo, que nació a raíz del ‘Mamás ante la crisis’ existente a nivel nacional y que cuenta con más de 7.500 integrantes, está dedicado a la compraventa y el intercambio de productos entre sus miembros, con la temática de la maternidad, los bebés y las necesidades relacionadas con los niños como eje central. Al principio, era una vía utilizada únicamente para comprar y vender pero, a raíz de la crisis, comenzaron a surgir los intercambios y a florecer la solidaridad. “Formamos parte familias enteras, abuelos, madres, padres…, y hay muchísimas mamás, hermanas, abuelas y tías”, señala García, creadora del grupo en la capital aragonesa. En él, la mayoría de productos que se compran, se truecan o se regalan son alimentos, ropa o diversos materiales, aunque la actividad va más allá de lo transaccional: “Publicamos información útil y noticias, y la gente también pregunta sus dudas sobre la maternidad o el embarazo, los colegios, las becas de comedor…”, explican desde el grupo.


Ahora, en plena campaña de recogida, las administradoras de este proyecto en la red social admiten todo tipo de donaciones y trueques con el objetivo de recaudar el máximo material escolar posible. Por ejemplo, cuando reciben bolsas de ropa, cambian las prendas por materiales a través de publicaciones en la red social del tipo ‘cambio dos pantalones por un bloc de dibujo o un cuaderno’. “Se están cambiando hamacas, carros de paseo para bebés y hasta ordenadores. Un chico trocó el suyo por un dinero que después invirtió en material escolar”, recuerda Noelia.


La transparencia es una de las claves de su funcionamiento. Por ello, se publican fotografías puntualmente que muestran los materiales comprados o donados. Igualmente, para seleccionar a las familias que recibirán ayuda a través de los lotes de material, los responsables de la iniciativa se aseguran de cuál es su situación y comprueban, por ejemplo, si están o no en situación de paro.


Puntos de recogida en los barrios

Las Delicias, Oliver, San José, el Actur o el Picarral son algunos de los barrios en los que se han establecido puntos de recogida para recibir el material escolar. A excepción de un comercio, el resto de puntos son hogares de madres que recorren los barrios para ir haciendo acopio de los productos. La pasada semana, Noelia García, además de recibir los procedentes de varios de estos lugares, también recogió otros llegados desde Utebo, Casetas y Garrapinillos. “Se están realizando donaciones incluso por parte de vecinos de pueblos. Mi hermana y yo tenemos todo el material en nuestras casas y ya no sabemos ni dónde meterlo”, cuenta entre risas.


Cuando finalice el periodo de recogida, administradores y moderadores de ‘Mamás ante la crisis Zaragoza’ empezarán a repartir el material escolar recaudado entre las familias. Este hecho también se corresponde con la filosofía de solidaridad que propugnan: “No hace falta ni comprar ni donar, solo con ayudar a guardar, a recoger algo de alguien, a distribuir o a informar de personas que puedan estar necesitadas es más que suficiente. Se trata de apoyar en general, porque ¿quién no conoce a alguien que necesita esa ayuda?”, afirma García. En esa tarea, desde el grupo tienen claro que las redes sociales son una herramienta muy potente para ello, pues permiten llegar a mucha más gente y conocer a personas que se portan “realmente bien”. Además, el boca a boca sigue siendo infalible: “El otro día, una vecina de mi barrio me paró por la calle y me dio cinco euros para que adquiriese material escolar”, ejemplifica."Es un época de locos"

Estos días, el también grupo de Facebook ‘No lo tiro lo quieres gratis’ de Zaragoza, es un no parar de publicaciones, trueques e intercambios de material escolar. Tanto es así, que sus tres administradores han tenido que contar con ayuda para controlar que las transacciones se cumplen y que no hay engaños. “Como en Navidad, se trata de una época de locos, pues es cuando más movimiento hay”, cuenta Sara Berges, una de sus responsables, que apunta que muchos, en lugar de trocar por comida, ropa o zapatos, lo hacen ahora por cuadernos, pinturas o mochilas.


Aunque este año no han realizado campaña de recogida de este tipo de productos escolares, sí lo han hecho en ocasiones anteriores y tienen previsto volver a organizar una el próximo curso. Concretamente, “el año pasado reunimos una barbaridad de material porque se volcó muchísima gente”, explican desde la administración del grupo, que también lleva a cabo recogidas específicas de juguetes en las fechas navideñas.


Además de cambiar material, en este ‘No lo tiro lo quieres gratis’, sus miembros –más de 17.000- también se informan de los lugares donde puede ser más económico adquirirlo, así como de las ofertas de uniformes, prendas de deporte, etc. Su espacio es definido como un lugar “para regalar o trocar lo que nosotros ya no necesitemos”, pues  “seguro que a otro le puede servir”.


Si bien, su funcionamiento durante las campañas difiere del habitual: “Normalmente, tú trocas tus cosas para obtener algo para ti, nunca dinero, e intentamos que sean siempre productos básicos”, explica Berges. Sin embargo, en las campañas de recogida, todo el que quiere dona para una persona o un grupo de personas: “Nos unimos para intentar ayudar. Por ejemplo, este verano se incendió la casa de una familia y realizamos una recogida de muebles, vajillas, ropa de cama, armarios… para ellos”, concluye la administradora del grupo, que añade que en él hay personas que ayudan muchísimo sin pedir nada a cambio.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión