Amores a primera vista en la Feria de Antigüedades
Este sábado por la tarde se subastarán objetos de todo tipo con irrisorio precios de salida.
El stand de Antigüedades Epoque entraba en el juego del regateo desde primera hora de la mañana. "Señora, ¿cuánto está dispuesta a pagar?", insistía la vendedora mientras su ayudante suplicaba: "Lléveselo, no nos haga volver a cargar con esto a la vuelta". La posible compradora miraba y remiraba un medio escudo de piedra con dos ángeles tallados y se hacía de rogar entre tanta duda: "No me alcanza el bolsillo para esto", comentaba indecisa. Contraria, por un lado, a pagar los 600 euros que marcaba la etiqueta pero sin terminar de dar la espalda al objeto.
Entre conversaciones similares se inauguraba este sábado la IX Feria de Antigüedades Ciudad de Zaragoza, una cita que reúne durante un fin de semana a 45 anticuarios y más de 30.000 piezas en el Auditorio de Zaragoza.
Muebles, mantones, reliquias militares, platería, arte oriental y religioso, juguetes y pequeños objetos de hierro y madera de distintas épocas se entremezclaban a la vista de los visitantes en un recinto convertido en el sueño de cualquier coleccionista.
Ángel, por ejemplo, se ha desplazado desde La Rioja hasta Zaragoza solo para pasear por esta feria. Es un coleccionista de objetos de hierro y de cobre de época y sabía que en este encuentro podría encontrar algo interesante. No se equivocaba, nada más llegar se ha enamorado de un tedero: "Valoro la antigüedad del hierro, cómo está estirado y cómo se ha forjado el círculo a golpe de martillo", comentaba ensimismado con la pieza entre las manos.
Mientras, Marisa y Olga, dos hermanas zaragozanas y descendientes de uno de los grandes coleccionistas de monedas de la ciudad - según el propio vendedor del puesto de numismática-, se dejaban llevar y disfrutaban como niñas con la compra de relicarios, dedales, miniaturas de marfil, medallas y "pulseras alfonsinas" que ya lucían puestas antes de la hora de comer.
Uno de los momentos más especiales de esta novena edición llegará este sábado a las 18.00 de la mano de la 'Gran subasta'. A esa hora los asistentes podrán pujar por el medio centenar de objetos que han aportado los distintos anticuarios: trineos antiguos, cuadros, jarrones... antigüedades que serán ofertadas a precios de salida casi irrisorios, según explicó este viernes la empresa Curiosity Antic, organizadora de la feria.
La entrada a la feria tiene un coste de tres euros y la feria se mantendrá abierta sábado y domingo de 11.00 a 21.00, ofreciendo una alternativa original y a cubierto para un fin de semana lluvioso como este. Los menores de 12 años entrarán gratis siempre y cuando vayan acompañados por un adulto.
