Fernández Díaz, tras el asesinato de Soraya: "Todos aprendemos de la experiencia"

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha reconocido que será necesario incorporar en los trabajos de la lucha contra la violencia de género la modificación de la distancia de domicilio entre los agresores y las víctimas de violencia machista para determinar el grado de riesgo.

Así lo ha señalado a los medios en Zaragoza antes de participar en el acto de concesión del uso de la bandera de España a la Jefatura Superior de Policía de Aragón donde se ha recordado a Soraya Gutiérrez, la última mujer fallecida en la capital aragonesa por violencia machista, y a la que también ha hecho referencia la madrina del acto, Pilar de Yarza, presidenta del Grupo Heraldo.

Aunque la mujer había contado con protección policial, los 400 kilómetros que la separaban del domicilio del supuesto agresor fueron al parecer uno de los motivos para que no se considerara el riesgo que sufría.

En este sentido, el ministro ha reconocido que "todos aprendemos de la experiencia", por lo que ha subrayado que "todo lo que haya que reformar para erradicar esta lacra será bienvenido".

El ministro ha apuntado que las once mujeres muertas por violencia machista en España este año "nos encartelan en nuestras conciencias para luchar contra esta execrable actuación".

Para Fernández Díaz la lucha contra la violencia machista debe ser "objeto de auténtica política de Estado" que "trascienda cualquier tipo de coyuntura política".

El responsable de Interior ha insistido en la necesidad de hacer todo lo posible "por desterrar esta lacra que nos avergüenza a todos como sociedad civilizada y democrática" y ha advertido que una sociedad que así se considere "no puede consentir que se produzca un día sí y otro también hechos tan aberrantes como la violencia contra las mujeres por el hecho de ser mujer".

Respecto a las circunstancias que concurrieron en el suceso, el ministro ha descartado apuntar detalles al encontrarse bajo secreto de sumario. Críticas del Observatorio contra la Violencia

Por su parte, la presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, María Ángeles Carmona, ha afirmado que una sociedad democrática y de hecho no se puede permitir que una mujer que haya denunciado maltrato por parte de su pareja sea asesinada cuando está bajo la protección del Estado.

A preguntas de los periodistas en el marco de unas jornadas sobre violencia de género organizadas por el PP de Asturias, Carmona ha reconocido que ha existido "un fallo absolutamente innegable" en la protección de la mujer asesinada en Zaragoza a manos de su ex pareja, a la que había denunciado por amenazas.

Ha resaltado que "lo que no se puede permitir es que una mujer que haya realizado el acto heroico de dar el paso de denunciar los malos tratos, que es una cuestión muy difícil, tenga que morir asesinada", ha subrayado.

No obstante, la presidenta del Observatorio ha dicho que es fundamental que las mujeres "sepan rechazar estas situaciones y las denuncien", ya que en 2015 se mantuvo el dato de que el 80 por ciento de las mujeres asesinadas no había denunciado su situación.

Desde la Asociación de Mujeres Amparo Poch han exigido la dimisión de Gustavo Alcalde como delegado del Gobierno en Aragón al cuestionar las decisiones tomadas.

Para esta asociación, es "inadmisible" que una mujer amenazada, que puso la correspondiente denuncia contra el maltratador, sobre el que pesaba una orden de alejamiento, 15 días después haya sido asesinada y su caso fuera calificado como de "riesgo mínimo".

"Lo mismo que no dudan el culpar a las víctimas cuando no han puesto denuncia, nosotras tampoco dudamos de que el delegado del Gobierno también tiene que asumir las responsabilidades políticas correspondientes al no dar la protección real necesaria a la víctima de este nuevo caso de violencia machista", subraya la asociación en una nota de prensa.