Épila actuará como acusación particular por el homicidio a tiros de un vecino

El argumento, ha agregado, es contribuir a cerrar un episodio que, reconoce, ha "desestabilizado" al pueblo.

Cecilio G. G., a su llegada a las 9.15 de ayer a los Juzgados de La Almunia para prestar declaración ante la juez del caso.
El detenido por el crimen de Épila lo niega todo pese a que los testigos le vieron disparar
aránzazu navarro

El Ayuntamiento de Épila  se personará como acusación particular en el caso del vecino que fue asesinado por otro el pasado viernes en plena calle de la localidad, ya que así lo ha aprobado el pleno del consistorio por unanimidad, ha explicado  el alcalde, Jesús Bazán.

Este martes por la tarde ha precisado, tienen concertada una reunión con el abogado para fijar en qué términos y condiciones ejercerá el municipio esta acusación particular y qué puede aportar el consistorio a la causa.

El argumento, ha agregado, es contribuir a cerrar un episodio que, reconoce, ha "desestabilizado" al pueblo, que lo ha llenado "de rabia contenida" y que le ha "cambiado la vida" al municipio.

Los hechos ocurrieron a las 18.00 del viernes cuando un vecino del pueblo de 57 años, sin antecedentes policiales, supuestamente disparó con un arma de fuego a otro vecino, de 51 años, que falleció después de que los servicios de emergencia intentaran reanimarlo.

El supuesto autor fue detenido horas después en un paraje de la localidad y el domingo el juez decretó su ingreso en la prisión de Zuera (Zaragoza).

"No había ocurrido jamás una cosa como ésta y teníamos que hacer algo", ha asegurado el alcalde de Épila, un pueblo con alrededor de 4.500 habitantes censados y ubicado a unos 45 kilómetros de la capital aragonesa.

Bazán ha reconocido que en el pueblo hay problemas de convivencia entre diferentes colectivos, pero este suceso "ha pasado los límites" y va a obligar al equipo de gobierno municipal a "tomar medidas" que, ha reconocido, "quizá se podrían haber tomado antes".

En este sentido, ha recordado que en ocasiones ya se ha pedido "con insistencia" a la Delegación de Gobierno en Aragón el incremento de la vigilancia y ha avanzado que podría estudiarse hacer cambios en determinadas ordenanzas municipales de convivencia.

Ha reclamado asimismo la implicación del Gobierno de Aragón, ya que hasta ahora en el pueblo se han sentido "muy solos", según Bazán.

Pero más allá de la vigilancia de la Guardia Civil, el alcalde reclama ayuda profesional para abordar el problema "desde la raíz", incluso en la escuela, porque "la formación y la educación deben de ser la base de la convivencia".

Bazán ha reiterado que desde que tuvo lugar el homicidio el viernes por la tarde y hasta hoy no se han producido incidentes de importancia entre vecinos, y se ha mostrado convencido de que "imperará el sentido común" y la situación seguirá así.

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