El dance de Cabañas de La Almunia cumple 20 años rodeado de público

Fiestas de la Virgen de Cabañas, 11 de septiembre.

Bailes y dichos. El dance en honor a la Virgen de Cabañas escenificó ayer la lucha del bien contra el mal y,  entre mudanza y mudanza con palos y cintas, se recitaron dichos que relatan acontecimientos actuales.
Bailes y dichos. El dance en honor a la Virgen de Cabañas escenificó ayer la lucha del bien contra el mal y, entre mudanza y mudanza con palos y cintas, se recitaron dichos que relatan acontecimientos actuales.
Macipe

Las altas temperaturas animaron ayer a cientos de vecinos a participar en la fiesta de la Virgen de Cabañas, que se celebró desde primera hora de la mañana con una romería que se inició en la plaza de la Iglesia de La Almunia de Doña Godina y finalizó en la ermita, donde se representó el dance, que se recuperó hace dos décadas.


Esta cita, que organiza la asociación cultural L’Albada con la ayuda de varios colectivos y del Ayuntamiento de la localidad, atrajo a más de 2.000 personas, tal y como explicó el presidente de la agrupación, Gonzalo Orna: "El día ha sido espectacular, quizá ha hecho demasiado calor, pero casi mejor".


La romería, que alcanza este año su edición número 21, discurrió por algunas de las calles del municipio y, de ahí, a la ermita, situada a dos kilómetros del casco urbano de La Almunia de Doña Godina, en la carretera de Calatorao.


Después de la misa, se representó el dance, que se recuperó en 1996, tras casi un siglo de ausencia. Bajo el fuerte sol se puso en escena la lucha entre el bien y el mal o, lo que es lo mismo, "el ángel, con la ayuda del mayoral y el rabadán, y el diablo y sus diablillos", tal y como explicaron desde L’Albada. Junto a estos personajes participaron los danzantes mayores y los chicos acompañados por los Gaiteros del Brazal Hondo, que interpretaron distintas mudanzas con palos y espadas. Durante estos bailes se fueron recitando los dichos que cada año relatan acontecimientos locales y generales, con un tono de crítica social aderezadas con un estilo somarda y sin perder el humor.


El día de convivencia continuó con una comida popular y, para mantener un ambiente animado, asociaciones culturales y sociales almunienses programaron a lo largo de toda la jornada actividades pensadas para todos los públicos. De esta manera, hubo visitas guiadas a la ermita y también se preparó una exhibición de juegos tradicionales. Además, por la tarde tuvo lugar una actuación musical, que puso el punto y final a una cita festiva que empieza a descontar ya los días que faltan para volver a celebrar la fiesta de la Virgen de Cabañas.

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