Belchite, un plató que cautiva al cine y la televisión

?Las ruinas de su pueblo viejo acogen cuatro rodajes al mes entre películas, anuncios, documentales y reportajes audiovisuales.

Alberto Boadella filmó en Belchite '¡Buen viaje, excelencia!', en 2002
Alberto Boadella filmó en Belchite '¡Buen viaje, excelencia!', en 2002
Oliver Duch/Heraldo

Es uno de los escenarios más impactantes de la Comunidad aragonesa. El pueblo viejo de Belchite, destruido en 1937 durante la Guerra Civil, es en la actualidad uno de los platós más demandados en Aragón a la hora de rodar. Entre sus ruinas se graban decenas de películas, anuncios, documentales y reportajes audiovisuales, tanto nacionales como internacionales.


Prueba de ello es la reciente grabación del anuncio de un videojuego que contó con el actor de origen austriaco Arnold Schwarzenegger, que acudió a Belchite el pasado 21 de mayo para protagonizar un rodaje envuelto en en el más absoluto secreto. O casi, hasta que se cruzaron con él los jugadores del equipo de fútbol CD Belchite, que ese día celebraban su permanencia en Tercera.


El pueblo viejo fue abandonando tras la contienda, cuando el régimen de Franco decidió edificar al lado una nueva población y dejar las ruinas como recuerdo de la Guerra Civil. Entre 1937 y 1938, se rodaron allí imágenes para algunos documentales bélicos pero no fue hasta 1987, cuando Belchite realmente comenzó a llamar la atención de cineastas y realizadores de cine y televisión gracias a su elección como una de las localizaciones principales de la superproducción internacional 'Las aventuras del barón Munchausen', dirigida por Terry Gilliam.

Rodajes todas las semanas

“En los últimos meses, se está rodando prácticamente todas las semanas. Tenemos hasta cuatro rodajes al mes”, confirman desde la dirección de la oficina de Turismo de la localidad zaragozana. Entre las distintas filmaciones, hay películas de cine que “requieren un permiso especial y precisan que se cierre el acceso al recinto de las visitas”, y también otro tipo de grabaciones para pequeños rodajes, “donde no es necesario restringir el acceso de los visitantes”, explican.


Mientras la Aragón Film Comission continúa sin definirse, los rodajes en este escenario han aumentado en los últimos meses. Uno de los último filmes realizados en tierras aragonesas ha sido 'Incierta gloria', de Agustí Villaronga, que escogió Belchite como una de las localizaciones de esta película ambientada en el frente de Aragón, en el año 1937, que además cuenta en reparto con la participación de los actores aragoneses Luisa Gavasa y Fernando Esteso.


Rodar en Belchite es más sencillo de lo que parece. Para ello solo hay que dirigirse a su Ayuntamiento o a la oficina de Turismo para solicitar los permisos necesarios. Desde Turismo, se evalúan las solicitudes y se gestiona todo lo relativo al acceso por parte de los equipos de rodaje y las localizaciones de exteriores previas a cualquier filmación.


Entre las películas más destacadas que se han realizado en el pueblo viejo en las últimas décadas figuran 'Las aventuras del barón Munchausen' (Terry Gilliam, 1988), '¡Buen viaje, excelencia!' (Alberto Boadella, 2003) y 'El laberinto del fauno' (Guillermo del Toro, 2005).

Un escenario para todo tipo de producciones

La tasa diaria para un rodaje es de 390 euros al día para aquellas producciones que requieran el uso exclusivo del recinto. Pero otras más pequeñas, en las que solo se necesita una parte del pueblo viejo para grabar, lo único que se pide es que se adapten a la visita. Este fórmula es la más adecuada para documentales y reportajes televisivos. La única tasa que deben pagar es el importe de la entrada normal (6 euros) de cada persona del equipo que participe y se puede grabar durante una hora y media.


El coste por día de rodaje es bastante inferior si se compara con el importe que se aplica por filmar en espacios como estaciones de tren, cuyo precio oscila entre 250 y 900 euros por una hora de grabación, en función del tipo de estación, si se trata de una producción de cine o televisión y si su difusión es nacional o internacional.


El alcalde de Belchite, Carmelo Pérez, explica que “el dinero que se recauda en el pueblo viejo se destina en parte a financiar el servicio de visitas guiadas. El resto, va a parar a las arcas municipales, reflejándose en los presupuestos para inversiones que el Ayuntamiento estime oportuno en cada momento. Indudablemente, cuanto más dinero se recaude más inversiones se podrán realizar y entre nuestras prioridades está, desde luego, el pueblo viejo de Belchite”.

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