EDUCACIÓN

Una treintena de familias pierden la plaza escolar de sus hijos por falsear datos

Educación confirma la mitad de las denuncias presentadas. Todas son en centros de Zaragoza, la mayoría concertados. Los puestos que se quiten a los tramposos se adjudicarán a los niños en lista de espera

Unos padres consultan las listas de admitidos en uno de los centros donde se ha detectado fraudes.
Una treintena de familias pierden la plaza escolar de sus hijos por falsear datos
OLIVER DUCH

Educación retirará la plaza escolar a 27 niños tras confirmar que sus padres hicieron trampas para conseguir que sus hijos entraran en el colegio que querían. Todas las familias descubiertas son de Zaragoza capital y en sus solicitudes aportaron direcciones en las que realmente no vivían, pero con las que obtenían más puntos para el centro deseado: si se reside cerca de la escuela se reciben 6, mientras que se dan solo 3 si el hogar está en una zona limítrofe y ninguno si se encuentra alejado.

 

La DGA ha conseguido confirmar la mitad de las denuncias recibidas. Cuando acabó el plazo para solicitar colegio, llegaron a la Administración 59 supuestos fraudes escolares, de los que uno no fue admitido a trámite y en el resto se inició una investigación. Educación notificó a las familias que presuntamente habían hecho trampas de que iba a examinar sus datos y en ese momento, 3 de ellas decidieron renunciar a la plaza escolar para no ser inspeccionadas. De los 55 casos sobre los que se actuó, 27 han sido demostrados y otros 28, desestimados bien porque la DGA ha considerado que la familia no había mentido en su solicitud o porque no ha podido reunir las pruebas suficientes para demostrar que sí se habían hecho trampas. "Ante un caso en el que no hay seguridad total, no podemos quitar una plaza", explicó Ana Isabel Ayala, directora provincial de Educación en Zaragoza.

 

Las denuncias confirmadas corresponden a seis centros de la capital aragonesa: Compañía de María, Jesús María El Salvador (Jesuitas), Nuestra Señora del Carmen (Carmelitas), Sagrado Corazón (Corazonistas), Santa María del Pilar (Marianistas) y Montecanal. Todos ellos, salvo este último, son concertados. Educación no ha especificado cuántos fraudes se han probado en cada uno.

 

La lista de escuelas es similar a la de otros cursos, "tal vez porque son centros en los que hay más vigilancia por parte de las familias o porque lo demanda mucha gente de fuera de la zona", señaló la directora provincial. Este año sí ha variado el número de denuncias, que ha disminuido. En 2008 se tramitaron 81 y se demostraron 50. La cifra fue mayor a la actual porque hubo un caso en Secundaria -en el Salesianos Laviaga Castillo de La Almunia de Doña Godina- que disparó la estadística al sumar 19 fraudes confirmados en un mismo centro. "Salvo por ese aspecto, estamos más o menos en las cifras que se han registrado en los últimos años. La situación se está normalizando", matizó Ayala. En 2007, Educación tomó medidas contra 25 familias residentes en Zaragoza de las 40 acusaciones interpuestas por falsedad en los padrones, y en 2006 hizo lo propio con otros 21 casos que pudieron ser comprobados.

 

¿Qué ocurre ahora con los tramposos? La Administración les ha enviado por correo una carta para informarles de que se les quita el puesto escolar que se les había dado y de que deberán esperar a que la comisión de garantías les busque sitio en otro colegio. Esto se hará antes de que comience el curso. "Se intentará darles uno cerca de donde viven", apuntó la directora provincial. No se les sancionará de ningún otro modo, aunque instituciones como el Justicia de Aragón han sugerido al Departamento de Educación que se replantee las medidas que adopta contra los fraudulentos porque considera que estas no son del todo disuasorias.

Reparto de los puestos libres

Y, ¿qué pasa con las plazas que se quitan a los fraudulentos? Se repartirán entre aquellos niños que no consiguieron entrar en el colegio y que se quedaron en la lista de espera. El Gobierno de Aragón ha remitido a los centros las instrucciones para que lleven a cabo la adjudicación de plazas y las familias serán avisadas de que hay vacantes en la escuela que querían. Puede ocurrir que los padres, al no conseguir entrar en ese centro determinado optaran por matricular a su hijo en otro. "En ese caso, también se les ofrecerá la posibilidad de ir al que eligieron en primer lugar", comentó Ayala.

 

Por ejemplo, un niño no pudo entrar en Montecanal y, por los puntos que tenía, se colocó primero en la lista de espera. Para que no se quedara sin centro, Educación le dio una plaza en Valdespartera y la familia matriculó al pequeño. Ahora, el Gobierno de Aragón se pondrá en contacto con esos padres para decirles que si quieren pueden llevar al pequeño a Montecanal o, por el contrario, seguir en la escuela de Valdespartera. Todo este proceso se hará en los próximos días.