Visitas guiadas para ver la berrea de los ciervos y su vistoso ritual nupcial

A partir del 19 de septiembre, Orihuela del Tremedal organiza visitas guiadas para observar en directo a los ciervos en sus rituales de emparejamiento en los bosques de la sierra de Albarracín.

Durante la berrea, los machos usan sus desarrolladas cornamentas para luchar con sus rivales.
Durante la berrea, los machos usan sus desarrolladas cornamentas para luchar con sus rivales.
Guillermo Mestre

Orihuela del Tremedal, en la sierra de Albarracín, es uno de los mejores sitios para asistir a uno de los fenómeno más vistosos y emocionantes de los que nos ofrece la naturaleza: la berrea del ciervo, en la que estos cérvidos se afanan en encontrar una pareja con la que aparearse. A finales de septiembre y primeros de octubre, las hembras de la especie están ya preparadas para concebir. Los machos, por su parte, se encuentran en su mayor esplendor físico y hacen exhibición de su poderío para impresionar a las hembras y que les escojan entre todos los candidatos. En ese afán para llamar la atención de la hembras, los machos lanzarán desde primeras horas de la mañana un bramido potente, oscuro: la berrea. «El monte y todo el entorno que nos rodea se llena de estos sonoros bramidos, a veces son tan fuertes que incluso llegan a escucharse desde el municipio», explica Rosa Mª Sánchez, alcaldesa de Orihuela del Tremedal.

Un combate espectacular

Cada uno de los machos tratará de aparearse con el mayor número de hembras posibles, y para ello no dudará en entrar en combate con otros pretendientes. Comenzarán así las embestidas entre ellos, en un resonante entrechocar de cuernos. Se trata de una pelea más espectacular que cruenta. Rara vez un macho resulta herido. Probablemente, el mayor riesgo es que los enemigos acaben trabados por las cornamentas sin poder separarse.

Orihuela es un buen destino para disfrutar de este espectáculo de la naturaleza ya que se trata de un hábitat idóneo para el ciervo, que lo ha habitado históricamente «por la abundante masa de pinar que tenemos en el entorno», explica la alcaldesa. Además, la reserva de caza de los Montes Universales que se encuentra en el municipio disfruta de una importante población de ciervos, con ejemplares de buen porte.

«Es todo un lujo pasear por los alrededores de Orihuela y sentirse rodeado de esos bramidos que inundan cada rincón, observar los rastros que dejan al marcar el terreno, las huellas que nos indican su presencia…», enfatiza Sánchez.

Se trata de una actividad recomendable para todo tipo de públicos. «Resulta idónea tanto para familias como para grupos de amigos que quieran acercarse a la naturaleza, disfrutar de ella y, de paso, aprender un poco sobre el mundo del ciervo», dice Sánchez. Los datos registrados por el consistorio señalan que «cada año estas visitas van tomando más fuerza, triplicando el número de asistentes de un otoño a otro», afirma.

No es raro porque, como dice la alcaldesa, «escuchar y vivir la berrea no es algo de lo que se pueda disfrutar todos los días y de una manera tan cercana».

Orihuela ofrece además otros atractivos turísticos con los que completar la visita, como su insólito río de piedra o los tremedales que le dan nombre: zonas de turba vegetal, tan esponjosa que, al pisarlos parece que la tierra tiembla. Y dentro de la la localidad, la iglesia de San Millán, de estilo barroco, declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1972.

Visitas al Centro de Interpretación

Desde hace años, el Ayuntamiento de Orihuela del Tremedal organiza excursiones guiadas para ver la berrea. La actividad incluye una visita al Centro de interpretación Reserva de Caza Montes Universales, desde donde se acerca al visitantes de manera muy visual al mundo del ciervo.

Después, los excursionistas llegan en su coche particular, dirigidos por el guía, hasta las cercanías del ‘hide’ desde el que podrán observar a los animales en la berrea. El último tramo se realiza en un paseo a pie «para no hacer ruido, ya que los ciervos estarán alertados porque les habrá llegado nuestro olor», explica Marta Abad, la técnico de turismo que dirige la visita. Además, el recorrido servirá para «ver huellas y rastros, y con suerte, podemos cruzarnos con un ciervo o algún ejemplar de otro tipo de fauna del entorno», afirma. Está previsto que las visitas duren aproximadamente un mes, hasta mediados de octubre.

Precio: 1 euro/persona.

Reservas: en el correo infoturismorihuela@gmail.com o en el teléfono 978 714 248.

Horario: 7.00, en las salidas de mañana; 18.00, en las salidas hacia el atardecer.

Salida: desde la Oficina de Turismo (C/ Carretera, 5). Se recomienda llevar prismáticos.

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