El Boletín Oficial de la Provincia de Teruel publicó el lunes, 16 de marzo, el pliego de condiciones de explotación de la plaza de toros de la capital mudéjar, abriéndose un plazo de ocho días para que los interesados en hacerse cargo de ella pudieran valorar su conveniencia.

Sobrepasada la fecha límite de presentación de ofertas, el coso no ha encontrado pretendiente alguno y es probable que quede desierto en el futuro más inmediato.

"A pesar de que hubo algunas llamadas de empresas interesadas, finalmente, el Ayuntamiento no llegó a recibir una oferta en firme", explica Jesús Fuertes, concejal delegado de la plaza de toros, quien confía en que la plaza "salga adelante".

Ante esta situación, la ciudad estudia posibles soluciones, entre las que, obviamente, está la de continuar buscando una empresa dispuesta a hacerse cargo de la regencia o que se encargue de organizar exclusivamente la Feria del Ángel, sin tener que atenerse a los dos años mínimos de contrato impuestos por el pliego.

La última empresa que estuvo al frente de la plaza, la Unión Temporal de Empresas (UTE) Coso de Teruel anunció hace algunos meses pérdidas de casi 200.000 euros en tres años. Dato para nada halagüeño, que tiene mucho que ver con la falta de aspirantes al recinto. 

Así, el ruedo turolense podría acabar albergando únicamente espectáculos alejados de los festejos taurinos mayores, como las vaquillas, conciertos o comidas populares. 

"El equipo de Gobierno municipal va a estudiar las posibles vías y se intentará darle a la plaza la salida más adecuada", señala Fuertes, quien valora que, "a diferencia de otras ciudades, el Ayuntamiento no subvenciona la Fiesta".

El pliego de condiciones

El coso salió a concurso por dos años, con una posible prórroga de dos más, que serían renovados año a año.

Las empresas ofertantes estaban obligadas a haber gestionado, durante al menos tres años, plazas de primera o segunda categoría y a especificar el proyecto de explotación demostrando solvencia económica.

Un requisito indispensable del texto es que el coso acoja un mínimo de dos corridas y un festejo de rejones en la Feria del Ángel, incluyendo la presencia de al menos a uno de los triunfadores en las ferias de Madrid, Sevilla o Valencia.

Otro aspecto a destacar es que el nuevo pliego reduce ostensiblemente el canon máximo a abonar por la empresa adjudicataria respecto al anterior concurso, pasando de 12.000 euros a 1.300.