Casi 400 policías velarán por la seguridad en La Vaquilla, que se espera más multitudinaria
El subdelegado del Gobierno cree que la mejora de la economía se traducirá en unas fiestas con mayor asistencia
Un total de 378 efectivos policiales trabajarán durante las próximas fiestas de La Vaquilla –arrancan este viernes y finalizan el 14 de julio– para garantizar la seguridad ciudadana. Son agentes de la Guardia Civil y de las policías Nacional, Local y Autonómica que se coordinan para evitar accidentes y hechos delictivos en unos días de máxima afluencia de gente a la capital turolense.
Se espera que este año La Vaquilla sea aún más multitudinaria que en ediciones anteriores, cuando la recesión económica estaba en todo su apogeo. De hecho, el subdelegado del Gobierno en Teruel, José María Valero, que ayer se reunió con responsables de los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad representados en la provincia para ultimar el plan de actuación, señaló que la población –35.000 habitantes– podría, en estas fechas, "duplicarse o incluso triplicarse". "La situación económica del país está algo mejor y eso se va a notar en un mayor número de gente", afirmó.
En concreto, 200 agentes de la Guardia Civil establecerán controles, desde 50 kilómetros a la redonda antes de llegar a la capital, para impedir que los visitantes conduzcan bajo los efectos del alcohol a la entrada o salida de la ciudad. Este servicio se verá reforzado por un helicóptero de la Dirección General de Tráfico que vigilará desde el aire la circulación de vehículos en los accesos a Teruel.
Por otro lado, 110 agentes de la Policía Nacional, junto con 45 efectivos de la Policía Local y 18 de la Policía Autonómica se ocuparán de que la fiesta transcurra sin incidentes en el interior de la ciudad. Un equipo específico experto en detectar grupos dedicados al robo de carteras y a los pequeños hurtos vendrá desde Zaragoza para apoyar la labor de sus compañeros.
El Ayuntamiento, por su parte, ha establecido dos ejes perpendiculares que garanticen la evacuación en caso de accidente. Uno de ellos cruza la ciudad por la calle del Tozal y la calle Nueva y el otro sale a la Ronda de Ambeles desde la calle Comandante Fortea. Estas vías estarán libres de peñas vaquilleras y puestos de venta ambulantes.Autobuses
Otra de las medidas acordadas ayer en la Junta Local de Seguridad, encargada de coordinar todos los efectivos, es que la entrada y salida de autobuses de línea regular de la estación –ubicada en pleno casco histórico y, por tanto, rodeada de peñas– estará escoltada por vehículos policiales. Además, habrá controles sanitarios de todos los puestos de venta ambulante dedicados a productos alimenticios.
El Ayuntamiento ha habilitado aparcamientos en las proximidades de la estación de tren, en la Fuenfresca y junto al edificio del Comandante Aguado, en la avenida de Zaragoza, pero prohíbe la acampada en parques, jardines o cualquier otro espacio público. "No podremos evitar el botellón que muchos visitantes organizan en sus propios coches a las afueras de la ciudad, pero no podemos permitir las acampadas", dijo el alcalde de Teruel, Manuel Blasco.
El alcalde destacó que gracias a la coordinación de los distintos cuerpos de seguridad, las fiestas de La Vaquilla en los últimos años se han saldado sin accidentes graves. "Solo por eso, merece la pena todo el esfuerzo", manifestó Blasco.
