Reforestar 240 hectáreas de monte quemado en las Cuencas Mineras cuesta un millón de euros

La empresa Coca Cola pondrá en marcha el próximo otoño un plan de regeneración forestal para 240 hectáreas arrasadas por el devastador incendio de julio de 2009, que acabó con la vegetación de 7.600 hectáreas de bosque y matorral entre Aliaga, Ejulve, La Zoma, Cañizar del Olivar y Villarluengo. La intervención se centrará en las 1.234 hectáreas de la "zona de influencia" del acuífero que nutre la planta embotelladora que la multinacional tiene en Cañizar y, más concretamente, en 240 hectáreas de titularidad pública.

El plan director ‘Plantando agua’, promovido por la empresa de refrescos, comportará una inversión de 1.055.000 euros a ejecutar entre 2013 y 2017, de los cuales Coca Cola aportará algo más de 200.000. La coordinadora del proyecto, Chus Sanz, de Ecología y Desarrollo (Ecodes), aclaró que, previsiblemente, el plazo de ejecución se alargará debido a las limitaciones presupuestarias ya que, de momento, solo la multinacional se ha comprometido a aportar fondos.

La primera actuación, de carácter simbólico, tuvo lugar el año pasado con la replantación de dos hectáreas de la Mezquitilla –en Cañizar del Olivar– con bellotas de quejigo y carrasca y plantones de pino. Para 2014 está previsto replantar otras 10 hectáreas en La Zoma. En total, en 2014, la multinacional tiene prevista una inversión de 74.000 euros y, hasta 2017, continuará aportando en torno a 50.000 euros anuales para aplicar el plan director.

El alcalde de La Zoma, Juan Manuel Membrado, instó al Gobierno aragonés a colaborar financieramente con el proyecto después de que la iniciativa privada "se haya mojado" con la elaboración del plan director y la inyección de fondos inicial. La Zoma fue una de las localidades más castigadas por la ola de incendios de 2009.

Las llamas lamieron las casas de las afueras del pueblo, que se salvó por la intervención de voluntarios, brigadas forestales y la Unidad Militar de Emergencias.

La reforestación se llevará a cabo con especies autóctonas, más adaptadas a las condiciones del terreno, menos exigentes en agua y más resistentes a los incendios forestales que algunas de las que poblaban los montes quemados, como el pino laricio, usado masivamente en las repoblaciones del siglo XX. Entre las plantas que se usarán, figuran el pino silvestre, el pino carrasco, el espino albar, el azarollo, la sabina, la carrasca y el quejigo. En algunas zonas no será necesario actuar al haberse regenerado de forma espontánea.

El plan director ha sido elaborado contando con las asociaciones e instituciones del territorio afectado y recibe el apoyo técnico del Departamento de Agricultura y de instituciones del ámbito académico como el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, la Universidad de Zaragoza, la Universidad de Barcelona o el Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo. La última visita de los técnicos del Gobierno aragonés y de las universidades para planificar la intervención se realizó el pasado día 26 de mayo.

El vicepresidente de la Comarca de las Cuencas Mineras, Javier Navarro, manifestó su "satisfacción" por el modo en el que se ha confeccionado el proyecto, que "va más allá de un plan de reforestación", y por el inicio de su ejecución, que animará la economía comarcal. Navarro explicó que las instituciones intentarán que las empresas y trabajadores en paro de la zona se beneficien de los contratos para la regeneración ambiental del área quemada.

Navarro, que forma parte del comité técnico de ‘Plantando agua’, explicó que la intervención no se limita a la reforestación, sino que tiene un apartado investigador, divulgativo y de participación. Señaló que, en las "microcuencas" de actuación, se realizará un seguimiento detallado de sus condiciones hidrológicas con estaciones automatizadas que controlarán la humedad, la evotranspiración y la precipitación, entre otros parámetros.

Chus Sanz explicó que para rentabilizar la intervención se tendrán en cuenta posibilidades de aprovechamiento del monte como la truficultura, la caza o el uso pecuario. Dentro del plan se elaborarán sendos estudios sobre carga ganadera y aprovechamiento cinegético.

El plan director pretende recuperar el paisaje, los ecosistemas y el funcionamiento hidrológico del acuífero que abastece a la embotelladora de Cañizar. La actuación intentará normalizar los ciclos del "agua verde" –la evaporada o consumida por la vegetación– y del "agua azul" –la que se infiltra en el suelo–. Sanz añadió que la experiencia tiene carácter "piloto" y podría ser aplicada a otras áreas calcinadas.