Los institutos estudian cómo evitar el maltrato de animales en las fiestas de fin de curso

El pasado jueves, alumnos de ESO metieron en los pasillos de dos centros 4 gallinas y 1 pollo y en otro intentaron introducir un cerdo

Amigo Mío rescató al lechón que iba a ser llevado a un instituto.
Amigo Mío rescató al lechón que iba a ser llevado a un instituto

Los equipos directivos de varios institutos de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) de la capital turolense mostraron ayer su preocupación por la costumbre, cada vez más extendida entre los alumnos de Bachiller, de utilizar animales domésticos en las fiestas de fin de curso. Desde hace unos cinco años, tras los vespertinos actos oficiales de graduación en el propio centro educativo, los estudiantes continúan con las celebraciones en la calle toda la noche y a primera hora del día siguiente acuden al colegio intentando alargar la diversión a costa de alguna mascota.


El pasado viernes, coincidiendo con estas fiestas, alumnos del Francés de Aranda soltaron en los pasillos del instituto 4 gallinas. Al momento, los profesores cogieron a los animales y los metieron en una caja llevándolos después a una granja. "No nos gustan estas acciones y queremos erradicarlas. Puede dar la sensación de que no educamos a los alumnos, pero no es así", manifestó el director de dicho instituto, Ernesto Antón. A su juicio, todos los centros de enseñanza Secundaria de Teruel deberían unirse, "como en Fuenteovejuna", para acabar con estas prácticas.


Ese mismo día, en el Segundo de Chomón, los estudiantes de Bachiller se presentaron por la mañana con un pollo recién salido del cascarón. El animalito fue rescatado por un profesor y entregado a la limpiadora, que lo adoptó como mascota. La jefa de estudios del centro, Ascensión Dobón, subrayó ayer que todo el profesorado del instituto "está en contra de esta moda". De hecho, el centro estudia pasar al viernes la celebración protocolaria a fin de que al día siguiente, al ser sábado, los estudiantes se encuentren las puertas cerradas y no puedan entrar."Estamos desesperados"

La dirección del Segundo de Chomón baraja incluso, como castigo, suspender los actos oficiales, si bien esta posibilidad ya fue planteada el año pasado a los alumnos sin éxito, pues igualmente continuaron la juerga en las instalaciones educativas. "Estamos desesperados porque todo les da igual", señaló Dobón. En 2012, los estudiantes acudieron a este instituto llevando varias gallinas.


En el instituto Santa Emerenciana, los estudiantes intentaron introducir un lechón, pero no lo consiguieron porque alguien avisó a la protectora de animales Amigo Mío y esta se presentó allí y lo recogió. El cerdo será enviado a un centro de asistencia a animales maltratados en Madrid. La asociación Amigo Mío estudia interponer una denuncia al haber oído que el lechón recibió patadas y le fue suministrado alcohol, extremos, no obstante, que la protectora investiga antes de acudir a la Justicia. "Algo no funciona en esta sociedad si nuestros jóvenes se divierten así con los animales", señaló la portavoz de Amigo Mío, Iovanka de Leonardo.


El director del Santa Emerenciana, Vicente Jiménez, mostró también su rechazo frontal a esta práctica. "No tiene sentido soltar a un animal por los pasillos solo para llamar la atención y desestabilizar la actividad educativa", señaló. "Un poco de concienciación y de sentido común debería servirnos para acabar con estas acciones".