La Comunidad de Albarracín pide un impulso decisivo para terminar el parque faunístico

El complejo, ubicado en Tramacastilla, se gestó hace una década y su obras se desarrollan con grandes parones.

Albarracín potencia el turismo
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JM. ALBALAD

Los pueblos de la Sierra de Albarracín reclaman a las administraciones provincial y regional una mayor apuesta por el proyecto del parque faunístico de Tramacastilla, con la asignación en el Fondo de Inversiones de Teruel, FITE, de este año de una partida suficiente para concluir la obra, que se ha venido ejecutando con parones desde hace ocho años. El deseo de los municipios es poder abrir las instalaciones en 2015.


El presidente de la Comunidad de Albarracín –entidad integrada por los 23 pueblos de la comarca y promotora del proyecto– José Miguel Delgado, dijo que en la comarca se echa de menos una mayor firmeza a la hora de apoyar este proyecto, gestado hace más de una década. «Vemos que en otras zonas se han invertido grandes cantidades en iniciativas de importancia y, sin embargo, en esta actuación, que sería la más ambiciosa de los pueblos de esta sierra, vamos mendigando el dinero», indicaba Delgado.


En el parque se van a acometer ahora pequeñas obras financiadas con cargo al FITE de 2013, que asignó a este fin 150.000 euros y que permitirán configurar los recintos donde se van a albergar las diferentes especies, así como el montaje de las instalaciones de agua en cada uno de los espacios. Con una partida de 200.000 euros, procedente de Fondo de Inversiones de 1012, se realizó el año pasado el vallado perimetral, la bomba para derivar el agua desde el río hasta los depósitos y la reparación de viales, deteriorados por el paso del tiempo y el desuso.


José Miguel Delgado manifestó que quedaría pendiente el sistema eléctrico y la adquisición de los animales. «Nuestro deseo es que este año pueda quedar terminado el complejo para poder abrir las instalaciones al público en 2015, si no es con todas las especies, al menos con las más atractivas», señaló el presidente de la Comunidad. «Todo dependerá de la financiación que consigamos con el FITE –agregó–, pero nuestro deseo sería ponerlo en marcha al cien por cien».


En los pueblos de mayor altitud de la Sierra de Albarracín están convencidos de que el parque faunístico supondrá un revulsivo económico, con la creación de puestos de trabajo y la posibilidad de diversificar la oferta turística de la comarca. Quieren captar la atención de los más de 100.000 turistas que visitan cada año Albarracín.

Paquetes turísticos

El presidente de la Comunidad explicó que la idea que se baraja es que el parque, destinado a mostrar especies autóctonas de la fauna del Sistema Ibérico en régimen de semilibertad, pueda completar paquetes turísticos con otros atractivos patrimoniales de la provincia. Según añadió, «se pueden aprovechar los flujos de visitantes que acuden a Dinópolis con objeto de alargar su estancia en la provincia y que pernocten en nuestros alojamientos». La intención de la Comunidad de Albarracín es ir trabajando ya en las ofertas turísticas, con circuitos que podrían incluir, según Delgado, «otros atractivos de los pueblos de interior, como el museo de la Trashumancia de Guadalaviar».


Se pretende, igualmente, definir la gestión del centro faunístico, en la que podrían colaborar los empresarios del sector ya asentados en la zona.


En principio, el parque también incluirá una superficie destinada a especies procedentes de centros de recuperación que hayan sido desahuciadas por presentar lesiones que les impida vivir en libertad.


El recinto se encuentra en una parcela de 23 hectáreas en el barranco de la Maleza, en Tramacastilla, próxima a la carretera. Se optó por esta localidad por su clima, menos extremo que el de los pueblos de mayor altitud de la sierra, y también por situarse en la zona central de la comarca de Albarracín.