Técnicos del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) siguen trabajando para restablecer el tráfico ferroviario en el tramo entre Mora de Rubielos (Teruel) y Barracas (Castellón), en la línea Zaragoza-Teruel-Sagunto, interrumpido desde la noche del pasado lunes a causa del desprendimiento de tierras provocado por las fuertes lluvias y que causó el descarrilamiento de un tren de pasajeros, sin que se registraran heridos.

Los trabajos, para los que Adif destina maquinaria especializada, técnicos de mantenimiento de infraestructura y topógrafos; se están centrando en subsanar las afectaciones que las lluvias provocaron en la trinchera, de 12 metros de altura y 200 metros de longitud, y que originaron dos deslizamientos de materiales.

Para ello, se están tomando datos topográficos para acometer el tratamiento y mejora de la estabilidad de la trinchera, con el fin de evitar nuevos desprendimientos. La solución consistirá en ejecutar un talud más tendido y en reponer y aumentar las protecciones y los sistemas de captación de agua.

Adif ha destacado que se está realizando un "gran esfuerzo" técnico y de recursos para "minimizar" el plazo de ejecución y de afectación a la circulación ferroviaria, según las mismas fuentes. Las operaciones en la infraestructura se iniciaron después de que el tren fuera encarrilado y retirado a última hora de la noche del miércoles.

Durante la ejecución de los trabajos, se mantiene el servicio alternativo por carretera entre Barracas y Sarrión, inicialmente hasta el próximo martes, 31 de marzo, cuando se establecerá una nueva previsión para el restablecimiento. Debido a los condicionantes que supone la utilización de autobuses, no está permitido viajar con animales ni bicicletas.