El alcalde de Bronchales dice que Pérez Berlanga es "normal"

El edil ha transmitido que tendrá todo el apoyo a pesar de que no comprender lo ocurrido.

El alcalde de la localidad turolense de Bronchales, Francisco Nacher, ha trasladado este viernes todo el apoyo de los vecinos a Daniel Pérez Berlanga, detenido tras empotrar su vehículo con dos bombonas de butano en la sede nacional del PP, en Madrid. "Aunque no entendamos nada" y lo sucedido "no se puede hacer", ha recalcado.


Nacher se ha dirigido a su convecino para decirle que "nos ha sorprendido mucho pero sabemos que esto es normal; algo te ha tenido que pasar", añadiendo que "vas a tener todo nuestro apoyo, aunque no entendamos" lo ocurrido, que "no se puede hacer".


Pérez Berlanga se presentó al puesto de vigilante micológico junto con otras 40 personas, pero no fue seleccionado para este empleo. Llevaba en el paro entre tres y cuatro años, ha proseguido el alcalde, quien ha comentado que antes había trabajado en una empresa maderera en Cella (Teruel).


En Bronchales "se nota muchísimo la crisis, había mucha construcción y se paró de golpe", ha continuado el alcalde, quien ha puntualizado que "en un pueblo la vida es más barata". El autor de los hechos vivía todo el año en esta localidad, que en invierno tiene 380 habitantes y en verano más de 8.000.


Este jueves "estaba normal", ha afirmado el alcalde, subrayando que "es un chico normal hasta esta mañana", por lo que los vecinos están "sorprendidos, consternados, preocupados". Nacher ha intentado hablar con el padre del detenido, pero no ha podido, al personarse la Policía en el domicilio para hablar con la familia.


Por otra parte, un vecino de la localidad ha señalado que "nadie podía pensar que iba a hacer esto", explicando que Pérez Berlanga "es muy servicial, muy amigo de sus amigos".


Ha indicado que "lleva mucho tiempo en paro pero no se le notaba nada raro ni tenía cosas raras". Aparentemente no estaba crispado, ha dicho el vecino, quien --al igual que el alcalde-- ha comentado que solicitó empleo como guardia para vigilar la recogida de setas y no fue seleccionado.


"En ningún momento le he escuchado decir que iba a hacer nada de esto", que "nos ha pillado por sorpresa a todo el mundo", ha dicho el vecino, recalcando que "nadie podíamos sospechar ni por asomo que podía hacer algo así".