Protesta contra la ZEPA de la laguna del Cañizar

Los sindicatos agrarios se han manifestado a las puertas de la sede del Gobierno de Aragón en Teruel para mostrar su oposición a la declaración de una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) en Cella.

Protesta de los agricultores contra el ZEPA de Cella
Protesta de los agricultores contra el ZEPA de Cella

Vecinos de Cella y Villarquemado se han concentrado eante la Delegación Territorial del Gobierno de Aragón en Teruel para apoyar a las organizaciones agrarias que han presentado sus alegaciones contra la declaración como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) de unas 600 hectáreas de tierras de cultivo en la Laguna del Cañizar.


De esta forma, al grito de 'no a la laguna' y 'queremos agricultura', unas 200 personas han acompañado a los representantes de ASAJA, UAGA, UPA, la cooperativa Cereales Teruel y la Plataforma en contra de la Laguna en el acto de entrega de las alegaciones.


Durante una hora han cortado el tráfico en la calle de San Francisco, la principal entrada desde Zaragoza al centro de la ciudad de Teruel, con pancartas con lemas como 'Ayuntamiento dictador', 'No a la laguna' o 'Laguna No' que portaban vecinos de Cella, Villarquemado y de otros municipios como Santa Eulalia, Alba del Campo o Villafranca.


El vicepresidente de la Plataforma en contra de la Laguna, Simón Rubio, ha explicado que existe un rechazo generalizado a la declaración de ZEPA "porque no nos han consultado" y sólo en Cella se realizó una consulta "y un 85 por ciento se mostró en contra de la ZEPA".  Rubio ha detallado que el Ayuntamiento de Cella ha planteado incorporar como ZEPA unas 600 hectáreas de tierras de cultivo que trabajan como arrendatarios vecinos de la localidad, "a los que no se ha consultado".


La declaración como ZEPA "es restrictiva", ha aseverado Rubio, para advertir de que si los agricultores reciben ayudas "es por la PAC y no por ser ZEPA", porque además las subvenciones agroambientales "obligan a los agricultores a sembrar más semillas para los animales, no para paliar daños".


La zona afectada "es un regadío sostenible" y los perjuicios que causa la Laguna del Cañizar son "anegación de tierras, pérdida de riegos y fauna no autóctona", como los búfalos de razas procedentes del sudeste asiático. También se ha registrado un aumento de jabalíes y aves como las grullas.

"Nos han engañado"

Según Rubio, a los vecinos de la zona "se nos ha engañado vendiendo un embalse cuando la intención era volver a crear la laguna", en realidad un antiguo marjal, que fue desecado en el primer tercio del siglo XVIII por el ingeniero Domingo Ferrari en un proceso de ordenación del río que nace en la fuente de Cella, el mayor pozo artesiano de Europa.


Esta ordenación de riegos y canalización de acequias afectó a todo el espacio conocido como Alto Jiloca, en cuyo centro existía la laguna del Cañizar en la que se acumulaban aguas de lluvia, la procedente de la fuente de Cella y en la que crecían cañizos y que fue desecada por las enfermedades que provocaban las aguas estancadas en Villarquemado.


El presidente de ASAJA, José Manuel Cebollada, ha coincidido con Rubio en señalar que "no se dio información" y hasta el momento se pierden unas 600 hectáreas de tierras de regadío y se crea "algo artificial porque aquí nunca ha habido búfalos".


Para el representante de UAGA, Roberto Sanz, el Ayuntamiento de Cella "está imponiendo" la declaración de ZEPA "contra la gente del municipio" que ya rechazó mayoritariamente esta declaración y, tras pedir calma y diálogo, ha reclamado "que se haga lo que la gente quiere, no se puede ir contra la voluntad de la gente".


El presidente de Cereales Teruel, Joaquín Pascual, ha señalado que son muchos los socios de esta cooperativa afectados y si la declaración de ZEPA empieza en esas 600 hectáreas de Cella continuará ampliándose a otros terrenos de cultivo.

Descenso de la producción de Cereal 

Con el proceso de recuperación de la laguna del Cañizar, impulsado inicialmente por los Ayuntamientos de Cella y Villarquemado, ha apuntado Pascual, se han visto afectados los cultivos con descenso en la producción de cereal y en la plantación de maíz, estimada en un 75 por ciento.


La aparición de vegetación en la laguna ha planteado el problema de su control, que se inició mediante la suelta de caballos si bien no ha dado resultado y actualmente se han llevado búfalos de razas procedentes del sudeste asiático.


Paralelamente han aumentado aves, entre otras las grullas, así como otros animales como los jabalíes que han conllevado la pérdida de tierras de cultivo de regadío, ya que la capa freática está a ras de suelo y el barro no permite el trabajo de la maquinaria agrícola.