TERUEL

Un gran andamio cubrirá 10 meses todo el cimborrio de la catedral de Teruel

Ayer comenzaron los preparativos para acometer las obras de restauración del templo, incluidas en el plan director redactado hace nueve años. Costarán 1,1 millones de euros.

Operarios de la empresa Edycon iniciaron ayer los trabajos de restauración de la cubierta superior y cimborrio de la catedral de Teruel con la instalación de un gran andamio que cubrirá parte del templo durante los próximos diez meses.


El Ayuntamiento concedió la pasada semana la licencia de obras a la empresa adjudicataria, lo que ponía fin a los nueve años de espera que han transcurrido desde que el plan director de la catedral fue redactado, y donde se incluye esta actuación, y el inicio del proyecto.


Los trabajos se centrarán en las cubiertas de la nave central y laterales, así como en el cimborrio, una de las estructuras más características del edificio religioso. En esta fase de obras se incluirá también una intervención en las fachadas de la nave central, en las que previamente se realizarán prospecciones para detectar posibles elementos decorativos.


Para este proyecto se han destinado 1,1 millones de euros, financiados a través del 1% Cultural que el Ministerio de Fomento dedica a actuaciones patrimoniales.


El andamiaje cubrirá todo el cimborrio y la cubierta de la nave central. En la fachada orientada a la torre campanario, la estructura metálica llegará hasta el suelo. Una grúa de grandes dimensiones se ubicará en la plaza del Obispado, justo en la esquina del palacio episcopal, y desde allí también discurrirá una escalera de acceso hasta la cubierta.


A pesar de lo aparatoso del andamio, el templo no se cerrará al culto salvo en ocasiones muy puntuales. El redactor del plan director, el arquitecto Joaquín Andrés, señaló que una de las ocasiones en las que está previsto restringir el acceso al público será cuando se instalen los sistemas de protección interior para llevar a cabo la intervención en las cristaleras del cimborrio.


Filtraciones y humedades


Los trabajos consistirán básicamente en la supresión de las humedades y filtraciones y en la impermeabilización de la cubierta para evitar que estos problemas se reproduzcan.


En el cimborrio se acometerá un proyecto integral, con el saneamiento de sus elementos arquitectónicos y la reposición de piezas cerámicas. Esta construcción, que posibilita la iluminación del retablo mayor de la iglesia, se caracteriza por su gran singularidad y por ser uno de los tres de estilo mudéjar que existen en Aragón.


Entre las actuaciones más destacables figura la apertura a las visitas de un andador exterior que facilitará la visión más cercana y al detalle de los aleros. Este corredor fue habilitado en los años cincuenta por Regiones Devastadas pero hasta ahora no había podido ser utilizado. Su recuperación permitirá incluirlo en el recorrido turístico de la catedral.


En la intervención en la cubierta de la nave central se ha incorporado un tratamiento específico en la techumbre, similar al que se llevó a cabo en las tablas policromadas de estilo mudéjar.


La última fase del plan director comprende una actuación en las fachadas. Para la cual, sin embargo, no hay fecha prevista. Quedará pendiente, asimismo, la restauración de la torre campanario mudéjar, que forma parte del conjunto declarado patrimonio de la humanidad por la Unesco en el año 1986.


Obras en la Vaquilla


Las obras no se interrumpirán durante las fiestas de la Vaquilla, que tendrán lugar a principios de julio. Ni siquiera afectarán a una de las peñas vaquilleras, cuya sede se localiza en la plaza del Obispado.


El alcalde de Teruel, Miguel Ferrer, explicó que tras analizar la situación con el arquitecto y responsables de la Diócesis, se ha comprobado que "es posible compaginar la fiesta con los trabajos de restauración de la catedral".