Más de 3.500 corredores solidarios se echan a la calle en Teruel

La XIV Carrera por la Discapacidad llena las calles de Centro Histórico de público de todas las edades.

Carrera Solidaria por la Discapacidad en Teruel en una edición anterior.
La calle de San Juan, repleta de corredores participantes en la Carrera Solidaria por la Discapacidad.
Jorge Escudero

Más de 3.500 personas han participado en la XIV Carrera Solidaria por la Discapacidad ‘Con Mucho Amor’, un evento a medio camino entre la práctica deportiva y la fiesta que se ha celebrado por las calles del Centro Histórico de Teruel para fomentar la integración de las personas discapacitadas. La prueba, de 1.200 metros, ha reunido desde ancianos de 80 años hasta bebés que se desplazaban en carritos empujados por sus padres.

La Carrera Solidaria, organizada por el Grupo Avanzamos -que aglutina a entidades y colectivos que trabajan con personas discapacitadas-, ha tenido salida y meta en la plaza de San Juan, donde durante toda la mañana se han llevado a cabo actividades lúdicas, como una exhibición de baile y una batucada. Al terminar, la organización ha repartido tazas de chocolate caliente y bizcocho a todos los participantes, además de una bolsa de regalo con unos pequeños obsequios donados por entidades colaboradoras.

El intenso frío de la mañana no ha amilanado a los turolenses, que han participado en mayor número que el año pasado. El recorrido se ha dispuesto para facilitar la participación de público de todas las edades y sin requerir un estado de forma especial. Entre los asistentes, hubo algunas personas que se movían en sillas de ruedas, que también se sumaron a la fiesta deportiva.

La director del centro de ATADI de Teruel -una de las entidades incluidas en el Grupo Avanzamos-, Irene Arroyas, se ha mostrado “encantada” por la respuesta ciudadana ante la “llamada a visibilizar” la discapacidad.

La organización ha contado con la colaboración de 80 voluntarios, que se han encargado de orientar a los corredores durante el recorrido, servir el chocolate en la meta y repartir los obsequios, entre otras misiones. La llegada de corredores, que se ha completado en torno a las 12.30, ha sido celebrada con la actuación del grupo de Batuka Borumbaia.

La implicación vecinal no ha parado de crecer desde la primera edición, que contó con 200 participantes. En 2015, se alcanzaron los 2.300 y el año pasado se superaron los 3.000.

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