Expectación ante la demolición del antiguo Asilo de San Julián

El edificio, con elementos modernistas, se reconstruirá como conservatorio y centro social.

La demolición íntegra del antiguo Asilo de San Julián, salvo la fachada modernista -que se conservará-, dentro de las obras para su reconversión en conservatorio de música y centro social provoca expectación entre los turolenses. Numerosos viandantes se asoman a la barandilla del antiguo viaducto de Teruel para observar cómo avanza el derribo del edificio, que se remonta a finales del siglo XIX y que incluye algunos elementos diseñados por el arquitecto modernista Pau Monguió.

La demolición se ha ampliado respecto a los planes iniciales, que preveían la conservación del ala del inmueble destinada a centro social y de la capilla, pero el mal estado estructural de ambos sectores ha obligado también a su derribo. Los cambios obligarán a llevar a cabo un modificado del proyecto, con un encarecimiento máximo del 7,5% respecto al presupuesto de adjudicación, de 6,9 millones de euros.

La alcaldesa, Emma Buj, señaló que la modificación del proyecto no retrasará las obras, que ejecuta la unión temporal de empresas formada por Contratas Vilor y Electrotecnica Monraval. La financiación corre a cargo del Fondo de Inversiones de Teruel.

El derribo entra este juves en su recta final con la demolición de la nave de la capilla. En su lugar se construirá un auditorio de uso compartido por el conservatorio y el Ayuntamiento.

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