La Guardia Civil detiene a dos personas por trece robos en explotaciones truferas

Habían sustraído cerca de 100 kilos de trufa negra en la provincia turolense.

La Guardia Civil detuvo el pasado 22 de enero a dos personas a las que se les imputan trece robos con fuerza principalmente a truficultores de la zona de Sarrión y Albentosa (Teruel). Estas dos personas habrían sustraído cerca de cien kilos de trufa negra en la provincia turolense, lo que alcanzaría un valor de 46.320 euros.


Tras las primeras sustracciones producidas en la provincia, a finales de octubre de 2015, se inició una investigación por parte de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Teruel denominada Operación 'Melanosporum'.


La explotación de esta operación ha permitido detener a dos personas por robos con fuerza en las cosas, que estaban creando "gran alarma social" entre los truficultores de la zona, no sólo por la sustracción del producto, sino por los destrozos ocasionados en los terrenos y fincas truferas, así como por el grave perjuicio económico para el sector en la zona de Albentosa y Sarrión, ha indicado la Guardia Civil en una nota de prensa.


Los detenidos, dos hombres de 66 y 37 años, vecinos de la provincia de Lérida, utilizaban siempre el mismo método. Actuaban de noche, cortando la valla perimetral que rodeaba las fincas agrícolas dedicadas al cultivo de Tuber Melanosporum (trufa negra), utilizando perros adiestrados que localizaban las trufas, que extraían cavando agujeros o pozos de un tamaño excesivo, como simulando que hubieran sido ocasionados por un jabalí, animal que causa grandes daños y destrozos en este tipo de plantaciones por sentirse muy atraídos por el olor de la trufa.


P.C.V. y D.C.N. robaban y almacenaban las trufas para después venderlas y sacar mayor beneficio económico. Asimismo, los investigadores pudieron constatar que, además de en Teruel, los detenidos también actuaban en las provincias de Burgos y Soria.


En la provincia de Teruel se les imputan trece robos con fuerza en los que lograron sustraer un total de 94,65 kilos de trufa negra, que alcanzaría un valor de mercado de 46.320 euros.Modus operandi

De la investigación llevada a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia, se ha podido detectar que estos hombres utilizarían un entramado complejo, consistente en la realización de contratos de arrendamiento de diferentes explotaciones agrícolas, en los que ellos mismos figuraban como arrendatarios para dificultar la labor de las Fuerzas de Seguridad ante posibles inspecciones, al no poder discernir entre lo recolectado legalmente y lo sustraído en los hechos delictivos investigados.


Igualmente, P.C.V. y D.C.N. tenían abierto un portal web en Internet, en el que ofrecían la venta de "trufas del Pirineo catalán al mejor precio". En Internet se anunciaban como una empresa familiar dedicada a la recolección de trufas, pero dicha mercantil no se encuentra registrada como tal.


Mediante los anuncios en Internet y la firma de ciertos contratos de arrendamiento de la explotación de fincas trataban de dar una aparente legalidad a los cultivos sustraídos mediante el robo con fuerza en las cosas que, además, tratándose de un producto altamente perecedero, dificultaría tanto las actuaciones policiales como judiciales para discernir la procedencia ilícita de las trufas.


Las detenciones se produjeron el pasado viernes 22 de enero al interceptar el vehículo de los autores a la altura de la localidad de Borja (Zaragoza). En el momento de la detención portaban más de 9 kilos de trufa negra, de la que se está investigando su procedencia, y utensilios como cámaras nocturnas, linternas frontales, GPS y herramientas diversas entre ellas cizallas para cortar alambradas y otras utilizadas en la extracción de las trufas.


También viajaban con dos perros especializados en la búsqueda de tuber melanosporum que fueron trasladados a la protectora de animales de Teruel. Los dos detenidos, P.C.V., de 66 años, y D.C.N., de 37, ambos residentes en la provincia de Lérida, fueron puestos a disposición judicial en la mañana del 25 de enero, siendo enviados a prisión, eludible con una fianza de 10.000 euros a cada uno.

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