El consumo de alcohol entre los jóvenes aragoneses ha aumentado hasta niveles "altísimos", una conducta que se ha enquistado y que comienza a practicarse a partir de los 14 años a pesar de ser "enormemente perjudicial" para la salud, según ha alertado la consejera de Salud y Consumo, Luisa María Noeno.

En declaraciones a los medios de comunicación antes de inaugurar una jornada de evaluación del borrador del II Plan Autonómico de Drogodependencias y otras conductas adictivas 2010-2016, Noeno ha remarcado que precisamente ésta va a ser una de las líneas de trabajo prioritarias en el plan.

El consumo de alcohol en Aragón comienza a partir de los 14-16 años y se mantiene estable, ha dicho la consejera, al tiempo que ha alertado de que no se trata de un consumo ocasional, sino continuo y "descontrolado", teniendo en cuenta que llega a convertirse "en una forma de relacionarse".

Esto "preocupa mucho" a las autoridades, ya que es "enormemente perjudicial" para la salud de los jóvenes, más aún cuando utilizan productos "de alcohol duro, barato y de mala calidad" y resulta ser una conducta "admitida", es decir, que lo hacen "a la luz de todo el mundo, ganando incluso campeonatos entre amigos".

Respecto al consumo de otras drogas, Noeno ha comentado que la heroína "hace años se dejó atrás, afortunadamente", pero le ha sustituido "con mucha fuerza" el cannabis y la cocaína, que "antes eran caros por lo que las personas con pocos recursos económicos o pocos años para tener dinero no podían comprar", pero que ahora han bajado de precio, por lo que hay que "estar muy atentos".

Algunos datos incluidos en el borrador -extraídos de la última encuesta entre adolescentes y jóvenes de 14 a 18 años escolarizados en la Comunidad- muestran que el 84,8 por ciento de los encuestados ha consumido alcohol, al menos una vez en la vida, y el 23 por ciento admiten fumar diariamente, con una prevalencia mayor entre las chicas.

El cannabis es la droga más extendida y el 29,5% de los encuestados dice haberlo consumido en los 30 días previos a la encuesta, un dato que contrasta con el hecho de que consideran estar suficientemente informados en relación al consumo de drogas.

Por ello, la consejera ha insistido en que en este segundo plan se incorpora "más carga en la prevención, en la información, en programas en positivo para fomentar la educación para la salud" prestando una especial atención "entre los colectivos más jóvenes".

También ha considerado Norno que se deben tener unos registros y unos sistemas de información adecuados que permitan comparar los datos con nosotros mismos y con el Sistema Nacional de Salud, para interpretar los datos y trabajar de forma conjunta "para prevenir algo que es muy dañino para la salud".

La finalidad del II Plan es disminuir los daños derivados de los usos problemáticos de drogas y otras conductas adictivas -como la ludopatía- para reducir la morbilidad y la mortalidad asociados a los consumos de tabaco, alcohol y otras drogas, así como evitar la pérdida de la calidad de vida y bienestar de las personas consumidoras, de su entorno próximo y de la sociedad en su conjunto.