ACCIDENTES EN EL PIRINEO

Ayer, un vecino de Sabiñánigo murió en la vertiente francesa de Portalet

Practicaba esquí de travesía junto a dos compañeros, que salieron ilesos, en el pico de Canal Roya, muy cerca de la frontera.En Formigal y en Candanchú hubo otras dos avalanchas por esquiar fuera de pistas

Lugar de la tragedia
Ayer, un vecino de Sabiñánigo murió en la vertiente francesa de Portalet
PEDRO FAURE

Un vecino de Sabiñánigo de 36 años de edad, Ricardo Araguás Izuel, falleció ayer sepultado por un alud en la vertiente francesa del Portalet. Los dos jóvenes que le acompañaban, también residentes en la capital serrablesa, resultaron ilesos. Además, un esquiador que se encontraba fuera de pistas pudo ser rescatado tras quedar enterrado por otra avalancha en Formigal, y en Candanchú se produjo otro desprendimiento, también provocado por un grupo de deportistas fuera del área señalizada, aunque por fortuna no alcanzó a nadie.

 

Según fuentes oficiales, la avalancha que acabó con la vida de Ricardo Araguás se produjo sobre las 14.15 en el pico Canal Roya, concretamente en la zona de Malacara, cuando los tres montañeros practicaban esquí de travesía. Un testigo presencial que realizaba una ruta por un monte próximo, Pedro Faure, relató que el alud fue "enorme". "Ha caído media ladera", añadió.

 

La gran colada de nieve sepultó al fallecido, mientras que uno de sus compañeros quedó semienterrado y pudo salir, y el tercero no llegó a ser arrastrado. Fueron estos últimos los que dieron la voz de alarma sobre las 14.30.

Amplio operativo de rescate

Hasta allí se trasladaron efectivos de la Gendarmería con un helicóptero de rescate, así como bomberos de los Pirineos Atlánticos. Al hallarse la zona muy cerca de la frontera con España, acudieron también agentes en montaña de la Guardia Civil de Jaca, Panticosa y Benasque. Este cuerpo también desplazó el helicóptero UHEL-41, con un médico especialista y varios perros adiestrados para la búsqueda de personas sepultadas. Según informó el diario francés 'Sud Ouest', el cuerpo pudo ser recuperado sobre las 16.50. Posteriormente, fue trasladado en el helicóptero de la Guardia Civil hasta el depósito del Hospital de Jaca, a la espera de que se le practicara la autopsia.

 

Sus dos compañeros resultaron ilesos. Se trata de H. M. P. P., de 24 años y originario de la República Dominicana, aunque domiciliado en Sabiñánigo; y de Ignacio S. S., de 34 años y vecino de la misma localidad.

 

Más fortuna tuvo un esquiador catalán que pudo ser rescatado tras quedar sepultado por un alud en una zona fuera de pistas de Formigal. Al parecer, otro grupo de aficionados cortó la nieve durante su descenso, provocando una avalancha que lo enterró durante unos minutos. Fuentes de Aramón informaron de que el suceso se produjo sobre las 12.45 en la zona de Espelunciecha, en un barranco situado entre las pistas de Cubilaret y Bocalé, que se encontraban "balizadas y señalizadas". Según las mismas fuentes, la nieve atrapó a un hombre que practicaba snowboard junto a un compañero, que no resultó afectado por la avalancha.

 

El propio acompañante dio el aviso al personal de la estación, que rápidamente se movilizó para acudir al lugar de los hechos, al tiempo que se activaba el plan de emergencia del centro y se alertaba al 112, Protección Civil, Guardia Civil y autoridades de la zona.

 

Los trabajadores de Formigal, acompañados de efectivos de montaña de la Benemérita que se encontraban en el complejo, se personaron de inmediato, aunque para cuando llegaron tanto el compañero del sepultado como otros esquiadores que se hallaban en la zona en el momento de ocurrir el siniestro ya habían empezado a cavar en la nieve para intentar desenterrar cuanto antes a la víctima. Los profesionales les tomaron el relevo y en pocos minutos lograron rescatar al hombre. Fuentes de Aramón comentaron que resultó "fácil" localizarlo, ya que la avalancha era de pequeñas dimensiones.

 

La rapidez con la que se produjo el salvamento hizo que finalmente no llegaran a desplazarse el helicóptero de la Guardia Civil y los perros, que estaban ya preparados para intervenir.

 

El hombre fue trasladado al centro médico de la estación, donde fue reconocido por el personal sanitario, que tras hacerle un reconocimiento, constató que no presentaba ninguna lesión.

 

Fue su compañero el que relató cómo se había desencadenado la avalancha, aunque de momento se desconoce la identidad de los esquiadores que supuestamente la provocaron. En este sentido, desde Aramón explicaron que "en ese momento, el objetivo principal era auxiliar a la persona que estaba enterrada". No obstante, la Guardia Civil ya ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias del suceso.

Susto en Candanchú

Mientras, en Candanchú, otra avalancha, originada al parecer por un grupo de esquiadores que practicaban snowboard fuera de pistas, también provocó un gran susto. Según explicó el director de la estación, Eduardo Roldán, el suceso tuvo lugar en la zona de la Rinconada y la nieve arrastrada llegó a entrar en la zona esquiable, si bien afortunadamente no alcanzó a ningún aficionado. Los causantes del alud no pudieron ser identificados. Roldán reiteró el gran riesgo que conlleva estos días salirse de las zonas señalizadas . De hecho, el pasado sábado, en la misma zona de esta estación, una joven de Pamplona también tuvo que ser auxiliada tras quedar sepultada por la nieve cuando se encontraba fuera de pistas. En el último mes, estas prácticas han provocado varios aludes más, sin consecuencias, en otros complejos como Astún y Formigal.

Otros tres muertos este año

Con Ricardo Araguás, ya son cuatro los montañeros fallecidos en avalanchas mientras practicaban esquí de travesía en menos de un mes. Las otras tres víctimas eran dos hermanos de Pamplona y su cuñado, que perdieron la vida el 9 de enero cuando ascendían al pico Collarada, en Villanúa.