FELIZ 2011

Mensajes optimistas para la cuesta de enero

Sufren y padecen como todos, pero son de los que viven la vida de frente y siempre ven la botella más que medio llena. Por eso, son perfectos para arracar un nuevo año y para mirar 2011 desde otra perspectiva.

Miki Nadal
Mensajes optimistas para el nuevo año

Un grupo de psicólogos británicos determinaron hace tempo que para saber el grado de felicidad de una persona basta con realizar una ecuación que incluye varios parámetros como el bienestar, el amor y el incentivo laboral. La fórmula matemática es: Felicidad = P + (5xE) + (3xN). Leída así, resulta algo complicada, pero en el cuadro lateral se explica cómo hacer el test para averiguar nuestro grado de felicidad.


Para algunos, la felicidad es una entelequia y para otros es simplemente sonreir a lo que le va ofreciendo cada día la vida. Todo depende de cómo veamos esa manida botella, si medio llena o medio vacía.


Cuando nos encontramos a las puertas de 2011, doce aragoneses de diversos ámbitos nos cuentan por qué son optimistas, por qué encaran sus problemas con una sonrisa. Su aspecto es el de los triunfadores, pero sus preocupaciones y dificultades son universales y la única diferencia es que se toman las contrariedades de frente y con ganas.


Los psiquiatras Juan Carlos Marcos y Antonio Campayo, del Hospital Clínico de Zaragoza, resumen que "ser optimista es volverse sabio. La persona que hace una valoración positiva de la vida, que ve oportunidades de crecimiento y que cree en sí mismo sin quedarse en la derrota, siempre es más feliz".

Jesús Morte, presidente de la CREA


El zaragozano Jesús Morte dice ser "optimista por naturaleza y por convicción. Es decir, tiendo a ver las cosas desde su aspecto más positivo, pero incluso cuando parece no haberlo, me esfuerzo por encontrarlo. Porque el optimista no es un iluso al que todo le parece bien y no ve los problemas; sino quien, consciente de ellos, los afronta con la confianza y el ánimo de superarlos. Y, si no es posible, al menos, de dejar atrás ese envite y mirar al futuro.


Estoy convencido de que el optimismo es el primer paso para conseguir cualquier objetivo. Más aún, es el impulso para actuar y no dejar que nos paralice la impotencia o el miedo. ¿Cómo va a iniciar nadie un proyecto sin creer que tendrá éxito, a solucionar un problema si piensa que no puede? ¿Cómo superar la crisis que sufrimos sin confianza en lograrlo?

Es conocida la importancia de la actitud en la recuperación de una enfermedad. Pues bien, lo mismo sucede en casi todos los ámbitos, incluida la economía.


Me niego a creer que somos meros receptores de lo que nos pasa. Podemos lograr nuestros objetivos personales, sociales y profesionales siempre que sean realistas. Podemos ganar a esta crisis, aprender de ella y salir mejor preparados para nuevos retos. Estoy convencido de que el año nuevo va a ser, con el esfuerzo de todos, el inicio de la recuperación, de que volveremos a crear empleo, de que en este milenio lograremos mayor desarrollo y bienestar para todos.


Churchill decía que el optimista ve una oportunidad en cada calamidad y el pesimista lo contrario. Yo elijo lo primero".

Itziar Miranda, actriz


La aragonesa Itziar Miranda ha heredado el optimismo de su madre. "Para mí, ella es una maga que consigue que hasta los momentos más duros tengan su lado de belleza, de aprendizaje... Es una mujer que siempre consigue que acabemos todos riéndonos ante las adversidades". La actriz protagonista de la serie 'Amar en tiempos revueltos' aconseja reírse de uno mismo para afrontar la vida: "A veces nos damos demasiada importancia, nos volvemos serios y solemnes y la vida es otra cosa. Hay que sonreír, porque al que sonríe le sonríen y si no... ¡probadlo!".


Para la actriz criada en Estadilla (Huesca), lo normal es que la vida tenga momentos duros, "eso significa que estamos vivos y que nos pasan cosas. Todos hemos vivido circunstancias difíciles y sabemos que vendrán más. Para mí este año ha sido especialmente duro por una enfermedad de alguien al que amo mucho. Pero he compartido mucho junto a esa persona: compañía, libros, películas... y ambos sabíamos que esa situación nos había unido mucho".


Según Itziar Miranda, "a veces uno camina muy rápido por la vida y se olvida de la gente que quiere. Y tiene que pasar algo realmente grave para parar y mirar a esa persona a lo ojos y darle lo mejor que tenemos mientras podamos". Para 2011, la intérprete tiene un deseo: "Aprender a disfrutar más de mi gente. Figúrate, quiero que me enseñen a hacer croquetas, que me encantan. Pero que conste que no espero del nuevo año nada de nada, que he decidido que, mejor, en lugar de recibir soy yo la que va a dar".

David Millán, piloto de trial


"Estoy en un curso universitario difícil y salgo de una lesión complicada, que me tuvo en 2010 apartado de la competición durante seis meses pero, en cuanto he podido subirme de nuevo en una moto, he sido optimista y he ganado mi primera carrera". El piloto turolense de trial, David Millán (Beceite, 1989), reconoce que, a pesar de su juventud, ha pasado por momentos "muy intensos y a veces difíciles" de los que ha salido pensando que "la vida se vive una vez y no merece la pena agobiarse ni ser negativo".


"Vivir del trial hoy en día es más que difícil", así que decidió estudiar Odontología en Huesca. Ya está en tercero. Reparte su tiempo entre las clases, los estudios y los entrenamientos y "aunque no dispongo de todo el tiempo que me gustaría, sigo ganando carreras en el campeonato de Aragón y defendiéndome en el nacional, europeo y mundial contra pilotos que se dedican única y exclusivamente a este deporte".


Este joven despuntó pronto sobre las dos ruedas. Con 5 años compitió en biketrial. Y tal fue su valía que incluso su localidad natal le dedicó una calle, siendo él tan solo un chaval. Los triunfos que ha ido consiguiendo no le apartan del camino que se ha marcado: "Mi primer objetivo es ser feliz, y si puedo lograrlo haciendo lo que me gusta, pues mejor".


Entre sus propósitos figuran terminar su carrera, encontrar el mejor trabajo posible, seguir practicando trial y pasarlo bien junto a los suyos. Y todo eso buscando "lo más positivo y sin pensar en lo peor, porque lo que no me mata me hace más fuerte". Metas no le faltan.

Ana Isabel Elduque, decana de ciencias


Ana Isabel Elduque (Zaragoza) cree que el dicho popular 'a mal tiempo, buena cara' resume en muy pocas palabras cuál debe ser, la actitud vital cuando llegan las adversidades. "Personalmente, intento tener una actitud optimista ante la vida. Los proyectos planteados, si queremos que lleguen a su culminación, han de ser de forma voluntarista. Ello no significa no ser consciente de las dificultades que acarrean, todo lo contrario. Tener una actitud positiva implica querer construir, avanzar aprovechando al máximo la energía, tener siempre palabras de ánimo para el que trabaja contigo y sonreír. Es una buena 'fórmula' para recorrer el camino sin fatiga. Incluso cuando el resultado no es el deseado…siempre se puede obtener una enseñanza del mismo.


Al Año Nuevo y al próximo decenio les pido tolerancia. Estamos inmersos en tiempos de cambios, es decir, de crisis. Solo con una actitud de apertura y flexibilidad hacia nuevos modelos sociales, seremos capaces de sobrevivir y crecer de forma equilibrada.


¿Qué le pido a la vida? Sin lugar a dudas, salud. En segundo lugar, oportunidades. Finalmente, buen humor. Con esos tres componentes bien combinados espero envejecer con 'dignidad'. Observo con alegría que los compañeros que han llegado a una edad avanzada con salud y optimismo se encuentran en plena forma física e intelectual. A esta simple 'receta' solo hay que añadir la sabiduría que han acumulado a lo largo de su trayectoria, para acabar de sacarle el máximo de su jugo a la vida… ¿qué más se puede desear?".

Luis Milla, seleccionador de España sub 21


A Luis Milla la vida le sonríe y él devuelve el gesto con espíritu optimista. El ex futbolista y actual entrenador de la selección española de fútbol sub-21 confiesa su filosofía: "Hay dos opciones de ver la vida, unos eligen ver el vaso medio vacío y otros creen que está medio lleno. Yo me quedo con este último. Aquel que afronta la vida con optimismo siempre se siente mejor".


Milla admite que, como todos, ha tenido momentos duros con el paso de los años. "La muerte de mi padre es uno de ellos. Y la lesión de ligamento cruzado en la rodilla. Son momentos difíciles que están ahí, que en ese momento cuesta mucho superarlos pero que con el tiempo se hacen más llevaderos. Ambas situaciones fueron muy diferentes pero fui capaz de sacarlas adelante".


El deportista turolense, que debutó con tan solo 17 años en el F.C. Barcelona y que forjó su carrera en el Real Madrid y el Valencia C.F., pide algunos deseos para el año 2011: "El primero de todos es la salud, para mí y para mi familia. Porque tener vitalidad es lo que te permite seguir disfrutando de los tuyos y del trabajo". Milla disfruta en la actualidad de su profesión como entrenador y espera que el futuro siga siendo así de positivo. "Me gustaría que la vida me siga sonriendo de la misma forma que ahora, la verdad es que no me puedo quejar".


Luis Milla asegura que la vida hay que tomársela con humor y con muchas ganas. "Pero para que esto sea posible, es imprescindible para mí tener cerca a mi familia y mis amigos. Son primordiales en mi vida".

Amor Pascual, alcaldesa de Alcañiz


"La vida me ha tratado bien. Yo he intentado corresponderle. Una familia estupenda, amigos con quien compartir penas y alegrías, un trabajo vocacional, buena salud… Sería ingrato no sonreir a la vida. Todos hemos sufrido momentos duros que afrontar sin saber muy bien cómo hacerlo. Sorpresas desagradables, pérdidas de seres queridos, fracasos, frustraciones… Con los años se van sucediendo situaciones de las que no podemos escondernos, ni escaparnos. Es entonces cuando hay que recordar que con el tiempo se adopta una visión panorámica más real y menos dramática; y que aquellos disgustos que tuvimos en el pasado ahora los recordamos con más serenidad. Otros sucesos llegarán, buenos y malos, a ocupar nuestro corazón.


Estos últimos años han sido duros y maravillosos. Cargados de nuevas experiencias gratificantes y satisfactorias pero también de otras estresantes y angustiosas. Tanto aprendizaje, tanta responsabilidad, tanto luchar por hacer bien el trabajo encomendado… Hemos estado de siembra, el próximo año toca recolección.


Hay que coger el paraguas cuando llueve, pero no es necesario abrirlo hasta que comienzan las primeras gotas. Por prudencia, es conveniente tenerlo cerca cuando se vislumbran nubes en el cielo. Así actuamos los optimistas. Cuando surge un problema, vemos la forma de resolverlo; sin agobiarse antes o dar todo por perdido de antemano. Es necesario tener ilusiones, trazarse metas, comprometerse, disfrutar de las pequeñas cosas para vivir bien. Y lo principal, rodearse de personas que te quieren y a las que querer".

Miki Nadal, humorista


El aragonés Miki Nadal (Pedrola, Zaragoza, 1967) es sinónimo de optimismo. Es inevitable sonreir al verle actuar. "Un día mi padre me dio un consejo: 'Da a cada cosa la importancia que tenga". Una máxima que él intenta llevar a todas las facetas. "Hay que relativizar todo lo que nos ocurre y el sentido del humor es una gran escapatoria a los pequeños dramas que nos angustian". Él lo pone en práctica en su trabajo y en su vida.


De hecho, tal y como explica este humorista, "nunca he creído en la vida como un valle de lagrimas. Estamos aquí para ser felices y ese es el fin último: la felicidad. Espero una vida feliz y lucho por ello". Y, en ese camino, ha tenido que sortear momentos duros. "El que más recuerdo lo solventé con un pensamiento positivo: 'A peor no puedo ir, así que todo lo que venga será para mejorar la situación'".


Una mentalidad que le ayuda en su día a día. "El ser optimista -afirma- te hace la vida más fácil y llevadera y sobre todo hace que los problemas se conviertan en retos, algo mucho más atractivo a la hora de afrontarlos".


Lejos de caer en el pesimismo, Miki Nadal intenta encontrar el lado bueno a cualquier obstáculo que se le presente en su día a día. Y, para 2011, ¿cuál sería su deseo? Este aragonés, que se ha convertido en una cara habitual en la pequeña pantalla, no duda en señalar que "para mí, el Año Nuevo siempre es un día ilusionante. Siempre me llega una sensación de borrón y cuenta nueva. Una nueva oportunidad para hacer bien las cosas y afrontar nuevos retos".

Adriana Abenia, modelo y presentadora


"Me gusta vivir al día para disfrutar de todo lo que me va pasando y jamás me pongo metas inalcanzables, es poco realista. Voy paso a paso, de manera que cuando vuelvo la vista atrás me sorprendo de todo lo que he ido logrando". Y es que Adriana Abenia, zaragozana, destacó como modelo y ahora triunfa como reportera y presentadora en la televisión.


Extrovertida y alegre, considera fundamental enfrentarse a la vida con optimismo: "Si te abres paso en los momentos difíciles con una sonrisa siempre vas a conseguir respuestas más favorables. Una persona negativa genera rechazo".


"Claro que he tenido momentos duros -continúa-, pero el secreto estriba en armarse de paciencia y una dosis de buen humor. Dependiendo de las circunstancias muchas veces pensamos que el mundo se nos cae encima sin remedio, pero el tiempo nos hace comprender que eso no es así. En ocasiones, cuando las cosas no salen como quiero me enfado y pienso 'lo mandaría todo a tomar viento', pero enseguida recapacito y me recompongo para superar los obstáculos que se van planteando y que te hacen crecer y madurar como persona".


Esta joven aragonesa, que por motivos laborales reside en Madrid, desea vivir la vida "con ilusión y junto a la gente que quiero". De hecho, asegura que "el plano profesional para mí es secundario, aunque no me puedo quejar". Y, para alcanzar este objetivo, "hay que estar a gusto con lo que uno es, sin faltar a tus principios, pase lo que pase y tener claro que se consigue más con miel que con hiel".

Jorge Cardona, tenis de mesa adaptado


"Sin el optimismo no se llega a ningún sitio, y más en el deporte. Es el motor que me hace seguir luchando y ganar un partido, el motor que me mueve a ir a entrenar todos los días o al gimnasio..." El jugador del CAI Jorge Cardona, zaragozano de 23 años, nació con un problema en los pies y se enfrenta a los retos sin perder la sonrisa. Esta filosofía y el esfuerzo y sacrificio de este medallista paralímpico se han visto recompensados: "Desde que tenía 5 años llevo jugando a tenis de mesa y he conseguido todos los títulos regionales posibles, algunos nacionales y ya, con los discapacitados, dos campeonatos de Europa y una medalla de plata en las Olimpiadas de Pekín en 2008".


"En la vida se pasan momentos difíciles pero si no existiera el optimismo en mi vida no estaría intentando entrar en la universidad ahora, no iría a entrenar después de una derrota, no iría a ningún campeonato más. ¿Para qué, si ya sé que voy a perder?" Esta forma de afrontar los retos para un deportista "lo puede ser todo y... ¿qué es la vida sino un partido muy largo?"


Para Jorge Cardona la nueva década es un mundo lleno de posibilidades: "Espero, ya no triunfar, sino sentirme bien conmigo mismo y eso será porque he hecho las cosas bien. Al fin y al cabo todo se basa en la felicidad". Y en su vida es fundamental tener amigos y relacionarse con los demás, un espíritu que potencia el deporte. "No sabría lo que sería de mi vida si desde el principio no hubiera existido el deporte, pero desde luego para mí ha sido una pieza fundamental". Su próxima meta será Londres 2012, donde "espero no decepcionar ni a la gente ni a mí mismo".

Rubén Gracia 'Cani' , futbolista

El zaragozano Rubén Gracia 'Cani' es optimista y siempre intenta ver el lado positivo de las cosas. Desde pequeño, cuando daba pelotazos en el barrio de Torrero, intentaba disfrutar del momento al máximo. "Ser optimista me ayuda a enfrentarme a los retos mejor. Ver el lado positivo de las cosas hace que disfrute más de las buenas rachas y que sufra menos en las malas", confiesa.


Cani ha tenido también momentos amargos en su vida. "Todos pasamos por circustancias duras. Las mías, afortunadamente, han estado siempre relacionadas con el fútbol, ya sea porque pasaba por una racha en la que jugaba poco, o bien porque había sufrido una derrota importante... también si notaba que estaba en un momento de bajo rendimiento. Reconozco que tengo momentos en que veo todo negro, pero a la larga siempre he sabido ver el lado bueno de las cosas". Para Cani, la clave fue "aprender que los malos momentos son los que más me han hecho madurar".


Cani disfruta ahora de un gran momento deportivo. El zaragozano se ha convertido en imprescindible en el Villarreal, que ocupa los primeros puestos de la tabla. "Para el nuevo año espero disfrutar hasta el último minuto del fútbol. Y en el futuro, cuando tenga que dejarlo, quiero disfrutar de los míos todo lo que ahora no puedo".


Cani quiere que el año 2011 le traiga tantas cosas buenas como le ha dejado 2010. "Como se suele decir, 'que me quede como estoy'. En el plano profesional estoy en un buen momento y en el personal, también. Estar con la gente que me quiere es fundamental".

Alexandra Jiménez, actriz


La actriz Alexandra Jiménez está convencida de que los pensamientos positivos tienen un gran poder. "No les damos la importancia que se merecen y son vitales. Cuando eres positivo y lo proyectas a tu alrededor, acabas yendo hacia el encuentro de tus ilusiones. Porque ser negativo paraliza, limita y al final descubres que no sale a cuenta".


La intérprete zaragozana, que triunfa en la actualidad con la serie 'La pecera de Eva', reconoce que a veces no ha sido tan optimista como en la actualidad: "La vida te trae momentos duros y lo ves todo negro, pero lo único que consigues es alargar una situación en la que no quieres estar. Cada vez voy aprendiendo a tomarlo todo de otra forma y, afortunadamente, siempre hay gente que te quiere y que está cerca para darte una colleja a tiempo".


Alexandra Jiménez confía en que 2011 llegue cargado de regalos. "Me gustaría que fuera tan bueno como 2010 y que toda mi familia disfrute de buena salud. Empezamos un nuevo decenio y me gustaría que estuviera cargado de sorpresas y de más magia". Jiménez espera que la vida siga estando llena de oportunidades, "para mí, es importante comprobar que todo lo que nos atrevemos a imaginar, todos esos proyectos que realizamos en nuestra cabeza, puedan hacerse realidad".


La actriz aconseja tomarse la vida con optimismo y para ello enumera los ingredientes que necesita para el 'cóctel de la felicidad': "Siempre amigos, cenas, música, risas... y perder el sentido del ridículo, porque hay que reírse con ganas de uno mismo".

Pedro Purroy, director del CSMA


Pedro Purroy, director del Conservatorio Superior de Música de Aragón (CSMA), es optimista "porque no tengo más remedio que serlo. Hace ocho años decidimos hacer del CSMA un lugar reconocido internacionalmente. Y lo hemos conseguido, con imaginación, trabajo tesón...". Según Purroy, los sueños son imprescindibles para avanzar en la vida, "hay que tener siempre la convicción de que se van a cumplir. Y con esa actitud, el buen humor llega por descontado". Para Pedro Purroy, "lo positivo va siempre ligado a la acción, lo negativo a la carencia de actividad. Solo la actividad es creativa, porque desarrolla la imaginación, abre caminos, produce ideas y sueños... en definitiva, produce vida".


El director del CSMA recuerda momentos duros de su vida, como la muerte de su madre cuando solo tenía ocho años. "Maduré en un instante, algo se produjo en mí en ese momento. Esa circustancia me influyó para contemplar de una manera especial la vida, de una forma positiva". También influyó su Jaca natal "la montaña, los árboles, el río, el silencio, el olor de la lluvia... y el recuerdo de mi madre. Todas esas cosas me impregnaron para siempre".


Pedro Purroy espera que 2011 sea tan positivo para el CSMA como ha sido 2010. "Queremos incrementar nuestro prestigio en España y el resto del mundo, establecer más relaciones con otros centros". Pero también tiene deseos personales para el próximo año: "Salud para poder seguir trabajando y poder compartirlo con mi familia y mis amigos, muchos de los cuales trabajan conmigo".