Los profesores de la concertada también reivindicarán su derecho a la libre elección de la jornada y, por lo tanto, a la jornada continua en los colegios de la Comunidad aragonesa. Han anunciado su participación en las concentraciones organizadas por la enseñanza pública por este motivo. La más inmediata: el 6 de abril.

Los sindicatos con representación en la Mesa Sectorial de la Concertada (FSIE Aragón, Feuso, CC. OO., UGT y FETE) informaron ayer a través de un comunicado de su postura sobre esta reivindicación, y recuerdan que el movimiento reivindicativo en el que se pide autonomía de los centros para elegir su jornada tiene una trayectoria de más de 20 años. «Se ha ido regulando en casi todas las comunidades autónomas, quedando solo tres: Cataluña, Valencia y Aragón, que se niegan a hacerlo», precisan en la nota informativa.

Así, la concertada ha trasladado a la pública su intención de sumarse a las movilizaciones convocadas para conseguir que la autonomía de jornada sea también un hecho en la Comunidad aragonesa. «La suma de todos nos hace más fuertes y nos acerca al objetivo común», precisan.

De momento, los sindicatos de la concertada han señalado que compartirán los mismos materiales y actividades que se convoquen. De hecho, a principios de febrero, más de 300 profesores ya salieron a la calle para reivindicar una jornada escolar continua. La mayoría de docentes se concentraron en Zaragoza -unos 200- y en Teruel -cerca de cien-. En Huesca, apenas llegó a la veintena. Las movilizaciones habían sido organizadas por un grupo de Facebook con el título 'Sí a la jornada continua en las escuelas de Aragón', que estaba integrado por más de 1.500 personas.

El Departamento de Educación mantiene por ahora una postura clara sobre la jornada continua. Según la normativa autonómica, deben impartirse cinco horas lectivas al día, divididas en sesiones de mañana y tarde (con un intervalo que las separe de al menos dos horas). Además, las familias también se oponen a un cambio horario, ya que consideran que no beneficia al alumno, dificulta la conciliación y genera desigualdades (por las actividades extraescolares).