Los pedagogos culpan del fracaso escolar a la rigidez del sistema

Expertos en psicopedagogía culpan del fracaso escolar a la rigidez del sistema educativo español por no adaptarse a las necesidades cambiantes de los alumnos, como ya han hecho otros países como Dinamarca o Finlandia.

Así lo ha señalado en rueda de prensa el presidente de la Asociación Aragonesa de Psicopedagogía, Juan Antonio Planas, quien ha apuntado, en la presentación de las actividades de su organización para el curso próximo, que las instituciones deben plantearse un cambio psicopedagógico en lugar de acciones coyunturales.

Introducir nuevas asignaturas en cuarto de la ESO o crear un nuevo itinerario educativo muestra que las instituciones "no están entendiendo la realidad de nuestro sistema, y por eso nos duele que todo lo que estamos viendo ahora sea maquillar la situación, pero no abordar el problema de verdad", ha insistido Planas.

El informe PISA

Según el informe PISA, en los últimos años la tasa de fracaso escolar en Aragón se situaba en un 29% mientras que la de abandono escolar era de un 31%.

Estas cifras han mejorado en el último año con una tasa de fracaso escolar del 25%, que por géneros es mayor en el alumnado masculino, 14 puntos superior al femenino, por lo que Planas ha reseñado que "aún nos falta mucho camino por recorrer hasta llegar al 10% de fracaso que sería lo deseable".

Aragón ha pasado en pocos años de 180.000 alumnos a más de 200.000 para los que sólo hay 400 psicopedagogos, un número que consideran insuficiente para atender las demandas del alumnado.

Desde la Asociación Aragonesa de Psicopedagogía insisten que las necesidades cualitativas son cada vez más complejas, ya que hace años el problema de la ciberadicción no existía o el problema de la anorexia era mucho menor, "por lo que hay muchas cuestiones que deberíamos atender como orientadores", ha explicado Planas.

El presidente de la asociación ha expuesto varios de estos casos referidos a esta deficiencia, como está ocurriendo con los centros de nueva creación, como los de Rosales del Canal o Valdespartera, en los que no se ha contratado a ningún orientador.

Hay otros casos en los que a orientadores se les ha reducido la jornada laboral y otros que, además de atender a un instituto, tienen que desplazarse a otros centros de pueblos cercanos, como es el caso de orientador de Fuentes de Ebro, que tiene que trasladarse también a Sástago y a Belchite.

Por todo ello, desde la Asociación Aragonesa de Psicopedagogía piden a los gobiernos central y autonómico que no se realicen recortes en materia de educación, ya que "si queremos salir de la crisis con medidas diferentes a las que hasta ahora ha habido se debería incidir más en cuestiones educativas", ha concluido Planas.