PATRIMONIO

La DGA quiere ver las dos tablas de García de Benabarre antes de pujar por ellas

El director general de Patrimonio Cultural acudirá a la subasta con otra experta para asegurarse de la autoría y procedencia de las obras

El Gobierno de Aragón está analizando toda la información recabada sobre las dos tablas góticas del pintor Pedro García de Benabarre que se subastarán el próximo día 28 en la sala Balclis de Barcelona, ya que existen dudas sobre su procedencia aragonesa.

 

Tampoco su autoría está clara para los responsables del departamento de Cultura, por lo que se ha decidido que el día de la puja se desplacen hasta la capital catalana el director general de Patrimonio Cultural, Jaime Vicente, y la catedrática de Historia del Arte y experta en pintura gótica María del Carmen Lacarra, con el fin de comprobar si merece la pena presentar una oferta para intentar hacerse con las dos obras. Según informó la casa de subastas, se trata de dos pinturas al óleo y temple sobre tabla de pino que representan a San Miguel Arcángel y a San Pelagio Papa.

 

Desde Balclis también aclararon ayer que las piezas que se sacan a la venta permanecen expuestas en la propia sala desde diez días antes de la fecha fijada para la subasta, por lo que no será necesario esperar hasta el último momento, como había previsto el Gobierno de Aragón, para resolver las incógnitas planteadas.

 

En cuanto a la autoría de estas dos pinturas, fuentes de la sala destacaron que su atribución a Pedro García de Benabarre "ya está publicada en catálogos", y que así lo han certificado algunos de los mayores expertos en arte medieval, como Antonio José Pitarch o Albert Velasco.

 

Más difícil será conocer la procedencia de las tablas, ya que desde la casa de subastas reconocieron que "no se sabe exactamente", si bien añadieron que "se cree que son de la iglesia de algún pueblo cercano a Barbastro o a Lérida, porque el autor, hacia 1480, que es cuando las pintó, trabajaba para estas dos diócesis". En este sentido, Balclis explicó en una nota de prensa que este artista, "uno de los mejores representantes del gótico peninsular", estuvo "activo en la Corona de Aragón y documentado entre 1445 y 1485".

 

Siempre según estas fuentes, son escasas las obras que quedan de Pedro García de Benabarre en colecciones particulares, y las que se subastarán este mes se encuentran "entre las de mayor tamaño y calidad". También se le atribuye la autoría de dos importantes obras incluidas en la lista de 112 que la diócesis de Lérida debe devolver a la de Barbastro-Monzón.

 

El Gobierno aragonés intenta determinar, tras solicitar los informes pertinentes sobre las pinturas que se subastarán en unas semanas, si pertenecen al castillo de Benabarre o si son piezas sin ninguna relación con otra tabla subastada recientemente. 'La Resurrección', que adquirió por 22.000 euros la Diputación de Lérida para cederla al Museo Diocesano de la ciudad. El hecho de que la DGA no participara en la puja al no enterarse suscitó una gran polémica política.

Cuatro informes de la otra tabla

En este sentido, desde la consejería de Cultura explicaron ayer que ya han recibido los cuatro informes (dos de técnicos del Gobierno de Aragón y otros tantos de expertos externos) que se encargaron hace casi un mes para atestiguar si la pieza, del siglo XV, es de García de Benabarre y procede de la iglesia del castillo de dicha localidad. Si así fuera, el Ejecutivo autonómico anunció en su día que ejercería el derecho de retracto para recuperar la obra. No obstante, Cultura no quiso adelantar las conclusiones de los estudios, alegando que "se están valorando".

 

La de La Resurrección no es la única obra del patrimonio aragonés que la DGA ha dejado escapar últimamente, puesto que tampoco pudo hacerse con una valiosa tabla del siglo XV atribuida a Blasco de Grañén y que pertenece al retablo de Lanaja. Esta vez sí que tenía noticia de la subasta celebrada en París, pero ofreció 25.000 euros y finalmente se vendió por 67.000.