CARNAVAL 2011

La corta vida de Cornelio Zorrilla en Bielsa

Trangas, onsos, domadores y madamas son, junto a Cornelio Zorrilla, los protagonistas de uno de los carnavales con más tradición.

Las trangas protagonizaron ayer la ronda de Carnaval en la localidad pirenaica de Bielsa.
La corta vida de Cornelio Zorrilla en Bielsa
JAVIER BLASCO

Cornelio Zorrilla representa el principio y el fin del carnaval en Valle de Bielsa. El jueves lo confeccionaron con ropas viejas rellenas de paja y esta tarde arderá en la hoguera, acusado de todos los males acontecidos en el valle durante el año. Mientras tanto habrá presidido las celebraciones desde el balcón consistorial. A sus pies, ayer el pueblo de Bielsa se volcó con su fiesta grande, ante la curiosidad de cientos de visitantes que volvieron a inundar la localidad para disfrutar de unos de los carnavales más antiguos de Aragón.


Cuentan que, después de la Guerra Civil, mientras la celebración estuvo prohibida en toda España, en este valle perdido del Pirineo oscense, alejado y mal comunicado, nadie se preocupó de que esto se cumpliera. Así, se mantiene una celebración con reminiscencias ancestrales: trajes, costumbres y tradiciones están perfectamente conservados. Las trangas, mitad hombre mitad choto, bajan de las montañas tras pasar el duro invierno, y persiguen ansiosamente a las madamas (jóvenes vírgenes e inocentes) para saciar sus deseos más primitivos. A su alrededor, los domadores dirigen a los temidos onsos (osos), recordando las fábulas y cuentos del Pirineo protagonizados por el que fue el animal más temido durante siglos.


Son poco más de tres días, pero muy intensos, y los belsetanos preparan desde hace semanas los disfraces (hasta cinco diferentes por persona) y todos los detalles que rodean a la fiesta. Los miembros de la peña El Alpiste, cuya pañoleta luce también en el pecho Cornelio, tienen mucha experiencia en la organización de los carnavales. Para este año han matado tres tocinos y han encargado el vino y la cerveza suficientes para acompañar a los embutidos y demás manjares resultantes de esta matacía.

Entre la multitud de disfraces que durante estos días abarrotan las calles y plazas, siempre los hay que destacan por su originalidad, elaboración o alusión a personajes famosos o políticos. Tres enormes arbustos recorrían ayer la Plaza Mayor, mientras un grupo de animadas colegialas jugaban a la comba esperando el regreso de las trangas, acompañados ya de las madamas. A su llegada, el público se aparta y les rodea, mientras los protagonistas bailan en círculo en el centro de la plaza, bajo la atenta mirada de Cornelio, a quien pocas horas de vida le quedan, hasta el próximo año.


Cada vez son más los turistas y curiosos que acuden desde lugares lejanos a celebrar con los vecinos de Bielsa este ancestral carnaval. La presencia de visitantes franceses es muy numerosa, como también de vascos, navarros, valencianos y catalanes, entre otros. La representación altoaragonesa es mayoritaria, y hay vecinos de casi todas las comarcas de la comunidad, en esta fiesta cada vez más popular en Aragón. Así, conseguir alojamiento en Bielsa para estos días es prácticamente imposible desde varios meses atrás, e incluso muchos pueblos cercanos cuelgan también el cartel de completo.