Huesca

Descontento en La Encarnación ante el cambio de emplazamiento de las fiestas

El Ayuntamiento aduce motivos de seguridad para trasladar la carpa y las ferias a la calle de Ingeniero Susín.

Las ferias se colocarán este año en la calle de Ingeniero Susín.
Descontento en La Encarnación ante el cambio de emplazamiento de las fiestas
J. S.

El próximo 10 de abril darán comienzo las fiestas en el barrio de La Encarnación de Huesca. Y este año, además, lo harán con una novedad importante. Y es que la carpa en la que se celebra la verbena, entre otros actos, así como la pequeña feria de atracciones, que se instalaban en la avenida de Martínez de Velasco, en el espacio verde próximo al hospital San Jorge, se trasladan este año a la calle de Ingeniero Susín.


El nuevo espacio comprende así parte del antiguo trazado de la vía del tren, ahora reconvertido en paseo. La noticia ha sido recibida con preocupación por parte de la Asociación de Vecinos. “El concejal y el Ayuntamiento ya saben que no nos gusta allí, pero si es por temas de seguridad, como nos han dicho, tendremos que acatar”, asegura la presidenta de la junta, Sara Mairal.


Como explica, según les ha comunicado el consistorio oscense, en la antigua zona no se cumple la distancia mínima de seguridad de tres metros y medio desde las atracciones a las viviendas. Por esta razón, el centro neurálgico de las fiestas pasa así al otro extremo del barrio, en la frontera con el vecino barrio de San José. “Nos cae a desmano. El emplazamiento anterior se encuentra en pleno centro del barrio, si es por un tema de seguridad, está bien, pero que conste que este nuevo emplazamiento no nos gusta nada”, insiste Mairal. Teme, de esta forma, que los establecimientos hosteleros, concentrados en torno a la antigua ubicación, se queden sin clientes durante las celebraciones.


Una de esas hosteleras es Rosa María Barba, quien se encuentra al frente del bar restaurante La Parrilla. “Solemos cerrar los sábados, salvo cuando son las fiestas, para dar un servicio al barrio”, comenta Rosa María, quien ahora se está planteando dejar de mantener esta tradición. “No se trata ya de ganar más o menos dinero. Han sido muchos años de lucha por parte del anterior presidente del barrio para traer el baile y las ferias a esta zona”, lamenta esta hostelera.


Considera así que esta es una muestra más del aislamiento al que se encuentra sometidos los vecinos tanto en esta como durante otras fiestas. “No nos ponen ni una banderita para San Lorenzo. Charangas no sé si hay o no, en esas fiestas, porque por aquí no pasa ninguna. Antes había fuegos artificiales, ahora, ni eso. Tenemos el mejor árbol de Huesca (en referencia a uno de los pinos de los jardines del barrio, de gran altura) y no le ponen ni un adorno para Navidad”, se queja.


En busca de participación

Los actos previos a las fiestas darán comienzo el 6 de abril a las 19.00 en el local social del barrio, con la presentación de la mairalesa infantil, Paula Consejo. Actuará además el grupo folclórico Os Faticos. Como reconoce la portavoz de la Asociación de Vecinos, este ha sido uno de los años que más ha costado preparar los actos, a causa de la falta de personal en la junta, que forman solamente 7 personas. “Pusimos anuncios para que nos ayudaran con las fiestas pero no se presentó nadie. Nos vemos obligados a implicar a nuestras familias”, asegura Mairal.


Pide así más participación por parte del resto de vecinos del barrio, ya que se trata de unas fiestas que “al final, son disfrutadas por todos”. “Sabemos donde nos hemos metido al formar parte de la junta, pero necesitamos un poco más de colaboración, ya que no podemos llegar a todo”, afirma Mairal.