La Guardia Civil intercepta en Lérida a un conductor tras una peligrosa fuga desde Huesca

Huyó desde las inmediaciones de la capital altoaragonesa a una velocidad de 200 km/hora.

Agentes de la Guardia Civil han interceptado esta mañana en Lleida a un vecino de Huesca tras protagonizar una peligrosa fuga desde las inmediaciones de la capital altoaragonesa a través de la autovía A-22.


Según han informado fuentes del Instituto Armado, el presunto infractor fue sorprendido por una patrulla en una calle de una pequeña localidad rural próxima a la capital altoaragonesa en la que no podía estar al pesar sobre él una orden de alejamiento sobre una persona domiciliada en la zona. Al ver a los agentes, desplazados desde Huesca para notificarle una comunicación oficial, el sospechoso cogió su coche e inició una rápida huida por la autovía A-22 en dirección a la ciudad de Lérida.


A la altura de Monzón se sumó a la persecución un coche camuflado de la Guardia Civil, que pudo registrar en su radar una velocidad media del huido de unos 200 kilómetros a la hora. Los hechos fueron comunicados por la Guardia Civil a los Mossos de Esquadra, que situaron un control a la salida de la autovía en Lérida para tratar de impedir que el sospechoso pudiera entrar en el casco urbano de la ciudad.


Tras saltarse el referido control, el presunto infractor, un vecino de Huesca de 42 años, fue interceptado por una patrulla de la Guardia Civil de la población altoaragonesa de Camporrells que se había sumado a la persecución antes de alcanzar los límites de Cataluña. Instantes después llegaban a la zona agentes de los Mossos de Esquadra y de la guardia urbana de Lleida para colaborar en la operación.


Las fuentes citadas aseguran que el presunto infractor ha sido imputado por presuntos delitos contra la seguridad vial, resistencia y desobediencia a la autoridad, y quebrantamiento de condena, y puesto a disposición del juzgado de guardia de Lleida.