El largo camino de vuelta casa del tapiz 'La Virgen y el Niño'

La pieza ha voladado a España en una caja de seguridad custodiada por la Guardia Civil.

?El tapiz de Roda de Isábena, de nuevo en Aragón
?El tapiz de Roda de Isábena, de nuevo en Aragón
Rafael Gobantes

El largo camino de vuelta a casa del tapiz 'La Virgen y el Niño', una valiosa tela del siglo XVI robada una fría noche de diciembre de 1979 en la Catedral de Roda (Huesca) por el conocido ladrón de arte Erik el Belga, ha concluido después de años de oscuridad y misterio respecto a su paradero.


En declaraciones, el jefe del Grupo de Patrimonio Histórico de la UCO de la Guardia Civil, Jesús Gálvez, reconoce que este viaje se inició en noviembre de 2010, cuando una conservadora del Museo de Lérida, Carmen Berlabé, reconoció, en un rastreo por internet, la tela.


El tapiz figuraba en un catálogo de venta del coleccionista belga De Witt, y, aunque no se detallaba el origen de la pieza, la conservadora se mostró convencida de que procedía de Roda, por lo que decidió llamar al vendedor.


Ante la negativa del vendedor a paralizar la venta y a informar del origen de la pieza, la especialista de Lérida decidió denunciar los hechos ante la Guardia Civil.


Mientras se realizaban todos estos trámites, el coleccionista belga vendió la pieza por 300.000 euros a una sociedad norteamericana con sede en Houston (Texas).


Treinta años después de ser vendido por Erik el Belga al coleccionista alemán que le encargó sustraerlo, que pagó entonces 30.000 dólares por la pieza, el tapiz surgía de nuevo de la oscuridad en la que se había sumergido desde la noche del robo.


Según Gálvez, la Guardia Civil puso inmediatamente en marcha una operación internacional en la que implicó a la policía de aduanas estadounidense y a la fiscalía de Texas, que decidió intervenir cautelarmente la pieza a la espera de conocer su verdadero origen.


La sociedad propietaria de la tela intentó evitar todo este proceso, pero la fiscalía lo impidió cuando pidió a sus responsables que acreditaran el origen de la pieza.

Expertos en tapices del gobierno aragonés y de Patrimonio del Estado vinculados a la casa real viajaron a Houston para tratar no sólo de identificar la pieza, sino de "individualizarla".


El responsable del Grupo de Patrimonio de la Guardia Civil asegura que un cotejo realizado a partir de la documentación gráfica que se conservaba antes del robo, entre otras una fotografía de 1908, permitió verificar que la tela presentaba los mismos rasgos y defectos que la pieza sustraída en Roda.


"Mediante esta labor -asegura- se consiguió individualizar la pieza sin ningún género de dudas, y el fiscal norteamericano lo entendió así, por lo que apoyó la restitución de la pieza al Estado español".


La entrega se hizo oficial en abril de 2013 en la residencia del embajador español en Washington, y poco después la pieza voló a España en una caja de seguridad custodiada por la Guardia Civil.


Tras permanecer bajo estudio durante más de un año en el Instituto del Patrimonio Cultural de España (IPCE), la pieza fue depositada hace unos días en el Museo de Huesca, donde permanecerá expuesta al público.


De los treinta años de oscuridad se conoce poco, sólo que pasó de mano en mano y que fue exhibido en varios países como un tapiz flamenco, sin hacer referencia alguna a sus verdaderos orígenes en la Catedral de Roda.