El Ball dels Totxets congregó a los vecinos

Santos Mártires del 30 de julio al 3 de agosto

No faltó a la cita anual con las fiestas de su pueblo el  periodista Manuel Campo Vidal, que también bailó

Ball dels Totxets, con Manuel Campo Vidal en primera fila.
El Ball dels Totxets congregó a los vecinos
Heraldo

Ataviados con pantalón negro, blusa o camisa blanca y fajín rojo a la cintura, un centenar de vecinos de Camporrells mostraron ayer por la mañana su ilusión y esfuerzo en el mantenimiendo de una de sus tradiciones más emblemáticas, el Ball dels Totxets, un dance al que cada año se unen niños y niñas que aprenden desde edades muy tempranas los pasos y el ritmo con que tienen que danzar con sus palos o ‘totxets’. Los bailes estuvieron amenizados al ritmo que marcaron los músicos de las bandas de Monzón y Graus.


Al acto asistió el presidente de la Diputación de Huesca, Antonio Cosculluela, acompañado por el alcalde, José Guillén, y otros miembros de la corporación, así como ediles de municipios próximos como Tamarite de Litera, Baldellou o Viacamp y Litera, que se sumaron a los actos de su día grande. 


A las 12.00, decenas de vecinos se dieron cita en las inmediaciones de la ermita de los Santos Mártires, desde donde mujeres y hombres se turnaron para portar las imágenes de los Santos Mártires que festejaban. Desde allí, y durante casi una hora de recorrido, el son de los ‘totxets’ marcaron  el paso de la procesión que discurrió por varias calles. El calor no hizo mella en el numeroso público que durante todo el recorrido los acompañó con aplausos, cámaras de fotos y teléfonos móviles en mano. 


Tras la procesión tuvo lugar una misa oficiada por el obispo de Barbastro-Monzón, Alfonso Millán. Después de la eucaristía, la plaza de la Iglesia volvió a vibrar al ritmo de los ‘totxets’, con la interpretación de nuevo de los compases de sus dances.


Nadie en Camporrells quiso perderse la fiesta mayor. Entre ellos el periodista Manuel Campo Vidal, natural de la localidad, que bailó como uno más. Cosculluela felicitó a todos por el mantenimiento de «estas costumbres que son patrimonio de cada pueblo y  forman parte de la identidad de Camporrells».