FUNDACIÓN

Salvar el legado de Ramón y Katia Acín

Los descendientes del polifacético humanista oscense y de su hija, la pintora fallecida en 2004, acaban de constituir una asociación que pretende rescatar del olvido a ambos artistas y reivindicar, difundir y divulgar sus figuras y sus obras.

No pasan desapercibidas. A los mayores se les ilumina la mirada recordando tiempos pasados, mientras que los niños juegan a su vera e incluso suben los escalones y estiran sus manos intentando capturar esas formas geométricas. Se trata de "Las Pajaritas" de Ramón Acín, esa gran escultura que preside un paseo lateral del parque Miguel Servet de Huesca y que se han convertido en todo un símbolo de la capital altoaragonesa. Constituyen la obra más conocida del polifacético humanista oscense Ramón Acín. Pero como artista y como persona, dejó un legado que va mucho más allá. Su hija Katia heredó su destreza y habilidad artística, siguió los pasos de su padre trazando una trayectoria "singular e interesante" que sus descendientes no quieren que caiga en el olvido. Hace tan solo unas semanas nació la "Fundación Ramón y Katia Acín".


Fue en el año 2004, cuando murió la pintora Katia Acín, cuando surgió la idea. El proyecto empezó a bullir en las mentes de sus descendientes. Y después de meses y meses dándole vueltas, "encontramos la fórmula y el momento oportuno". El pasado 11 de febrero, el Boletín Oficial de Aragón publicaba la orden en la que se daba a conocer que la "Fundación Ramón y Katia Acín" quedaba inscrita en el Registro de Fundaciones de Aragón.


Los fundadores de este colectivo son los cinco hijos de la artista Katia Acín -María Catalina, Ana María, Ramón, María Concepción y Federico García-Bragado Acín- junto a su primo Sergio Lindemann Acín, hijo de Sol Acín, hermana de Katia, y todos ellos nietos del célebre artista oscense Ramón Acín. La fundación nace con el objetivo de "reivindicar, difundir y divulgar las figuras de Ramón y Katia Acín, su obra artística y los valores que uno y otro representan", informó Ramón García-Bragado Acín. En definitiva, se trata de poner en valor el gran legado que han dejado estos dos oscenses.


Sus descendientes, saben bien que Ramón Acín es una persona histórica muy conocida y relevante en la capital altoaragonesa. El artista y pedagogo da nombre al colegio mayor universitario de la ciudad, al igual que a la beca artística que otorga la Diputación Provincial de Huesca. Gracias a una suscripción popular se sufragó la placa conmemorativa que en la fachada de Casa de Ena (Calle de Las Cortes, 3) recuerda que allí vivieron Ramón Acín y su esposa, Conchita Monrás, hasta el verano de 1936, cuando fue fusilado en las tapias del cementerio oscense. Días más tarde, moriría su mujer en las mismas condiciones. "Su delito: amar la libertad y luchar por ella", reza el cartel que cierra una pajarita y que fue colocado por simpatizantes de Acín, grupos de republicanos y libertarios hace ya cuatro años.


Gestionar, autentificar y preservar la obra

"Merece la pena que sea recordado", exclama uno de sus nietos, quien enseguida añade que "Katia, nuestra madre, también ha tenido una trayectoria singular e interesante, fue una artista con una obra gráfica importante que, además, hay que gestionar, preservar y autentificar, porque son grabados y es muy importante que quede registrada". Los valores que enmarcaron las generaciones contemporáneas de estos dos artistas y los que ambos compartieron con sus familiares y amigos más cercanos son también enseña de la fundación.


De este colectivo impulsado por la familia, también forman parte la periodista barcelonesa Mercé Ibarz, el profesor de la Universidad de Zaragoza Manuel García Guatas y la galerista oscense María Jesús Buil. Además, han cursado invitaciones para que entren a formar parte del patronato la Diputación Provincial de Huesca, el Gobierno aragonés y el Ayuntamiento de Huesca. En la Comisión de Relaciones Institucionales del pasado jueves 21, el ayuntamiento oscense ya mostró su apoyo.


Hacerlos visibles en Internet

Una página web con sus nombres y que dé a conocer a estos artistas es la primera acción que ya ha encargado la Fundación Ramón y Katia Acín. "Si no es a través de artículos de terceras personas -relató Ramón García-Bragado-, son figuras difíciles de encontrar en internet". En ella trabaja Emilio Casanova, quien ya profundizó en la vida del padre de las pajaritas. En 2005 se presentó "La línea sentida", un DVD dirigido y coordinado por Emilio Casanova y Jesús Lou que recopila la práctica totalidad de documentos existentes en torno al intelectual y artista oscense. La obra contiene 5.300 facsímiles recogidos y sistematizados en un proceso que duró tres años.


Y aunque la siguiente reunión del Patronato será el próximo 1 de marzo en Huesca, la web, como reconoce Ramón García-Bragado, no estará operativa hasta mediados del mes de abril. La segunda actuación pasa por reeditar un catálogo razonado de la obra de Katia Acín "para dar a conocer ampliamente su obra".