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Las negociaciones entre la DGA y los dueños de la Cartuja cumplen dos años sin avances

Patrimonio envió una tasación a la propiedad y no ha obtenido respuesta. La compra es la única vía para frenar el deterioro del monumento

La Cartuja es propiedad privada y solo puede visitarse los domingos por la mañana.
Las negociaciones entre la DGA y los dueños de la Cartuja cumplen dos años sin avances
PATRICIA PUÉRTOLAS

Sin avances". Así se encuentran las negociaciones para la adquisición de la Cartuja de Nuestra Señora de Las Fuentes, que se iniciaron en noviembre de 2007 y que tenían el objeto de evitar el acelerado deterioro del monumento. Más de dos años después de abrirse el diálogo entre la DGA y la familia Bastarás, propietaria del inmueble ubicado en Sariñena, ambas partes confirman que "no hay novedades" y se escudan en la "complejidad" del asunto. La Dirección General de Patrimonio del Gobierno de Aragón asegura que se remitió a la familia Bastarás la tasación realizada por una empresa especializada y que actualmente "se sigue esperando una respuesta".

 

Por su parte, el despacho de abogados Torrente, que representa a los propietarios, insiste en que la situación es "complicada, ya que existen varios familiares implicados y cada uno de ellos tiene su propio criterio". "Aunque se está trabajando, este tipo de negociaciones suelen ser largas y ahora mismo, es imposible ofrecer una previsión de cuando se alcanzará un acuerdo", manifiestan. Aunque tampoco se atreve a dar plazos, Jaime Vicente, director general de Patrimonio Cultural, dijo recientemente que "no creo que tardemos mucho en alcanzar un acuerdo o en constatar que no existe y buscar otra solución".

 

Por otro lado, la misma falta de entendimiento entre ambas partes impide el desarrollo de nuevas obras de rehabilitación y en consecuencia, aumenta, entre otros, el riesgo de hundimiento del chapitel de la torre campanario o las humedades que afectan a las pinturas murales de fray Manuel Bayeu, cuñado y discípulo de Goya.

 

Propuesta de las Cortes

En este sentido, cabe recordar que en marzo de 2009 las Cortes de Aragón aprobaron por unanimidad una propuesta parlamentaria que debía permitir la intervención en el enclave, pero han pasado diez meses y las actuaciones siguen sin efectuarse. Tras el acuerdo parlamentario, la Dirección General de Patrimonio asegura que envió un escrito oficial a la familia Bastarás advirtiéndole del estado del inmueble, declarado Bien de Interés Cultural, y recordándole su obligación de mantenerlo en buenas condiciones, según apuntaron fuentes de la DGA.

 

No obstante, la familia Bastarás todavía "no ha contestado" y por ello, desde el área de Patrimonio insisten, de forma gráfica, en que ahora "la pelota está en su tejado y debemos esperar, ya que no podemos actuar sobre una propiedad privada". Así las cosas, el hundimiento de la torre campanario de la Cartuja de Nuestra Señora de Las Fuentes es cada vez más evidente y bajo el mismo, las pinturas de Fray Manuel Bayeu y el resto de elementos se encuentran expuestos a las inclemencias del tiempo.

 

Actualmente, el enclave, que fue fundado en 1507 por los condes de Sástago, puede ser visitado los domingos entre las 9.00 y las 12.00 en virtud del convenio existente entre los propietarios y el Gobierno de Aragón. El quinto centenario del inmueble (noviembre de 2007) coincidió con el anuncio del inicio de las negociaciones y durante el mismo, una amplia representación del tejido político y social de Los Monegros se dio cita en las inmediaciones del enclave para reivindicar su "urgente" rehabilitación.