PIRINEO

La unión entre Astún, Candanchú y Formigal costaría 35 millones de euros

La Asociación Turística del Valle del Aragón ha encargado a una empresa un estudio para conectar las dos estaciones de la zona. En una segunda fase pretenden llegar al Valle de Tena.

Todos los miembros de la ATVA tras la presentación del proyecto de unión de Astún y Candanchú.
La unión entre Astún, Candanchú y Formigal costaría 35 millones de euros
a. i.

La unión hace la fuerza. O por lo menos así lo creen en el Valle del Aragón, que ha decidido luchar contra la fuga de esquiadores con una clara apuesta: la conexión con remontes de Astún y Candanchú. En una segunda fase, estudiarán si es posible llegar hasta Formigal para crear un gran dominio esquiable de 200 kilómetros capaz de competir con los grandes de Europa. El proyecto, aseguran los impulsores, es "sostenible" medioambientalmente, porque "no se planean urbanizaciones ni aparcamientos en los fondos de valle", y también económicamente, ya que costaría entre 35 y 40 millones de euros.

 

Estos datos los dio a conocer ayer la Asociación Turística del Valle del Aragón (ATVA), a la que pertenecen las dos estaciones, los empresarios y los ayuntamientos de la zona, durante la presentación del encargo que han realizado a la reconocida empresa canadiense, Ecosing. Se trata, precisamente, de que elabore un estudio 'master-plan' que analice las posibilidades de unión de Candanchú y Astún, y de ambas con Canfranc en una primera fase. El informe costará 60.000 euros y estará listo en tres meses. Fernando Sánchez, presidente del colectivo y alcalde canfranqués, apuntó que en dicho documento se plantearán al menos dos posibilidades de unión con remontes.

 

"Queremos fomentar los núcleos urbanos que tenemos", insistió. Por eso no planean ni urbanizaciones ni aparcamientos en los fondos de valle, una iniciativa que insisten "hace el proyecto sostenible medioambientalmente". La idea de la que parten es que sea la localidad de Canfranc la que distribuya los esquiadores. Bien en tren, algo que destacó Sánchez, bien en coche, los aficionados llegarán al Valle del Aragón. Desde la propia estación internacional de tren, bajo la que se construye un gran aparcamiento, partiría un remonte hacia las estaciones que podría llegar a la zona de Piedras Rojas, justo frente al cruce de la entrada a Candanchú. De ahí, partirían otros dos, uno hacia cada estación.

 

Entre las dos, sin crear ni una sola pista más, ya sumarían 80 kilómetros esquiables con los que competir con otros destinos españoles. "Son dos dominios colindantes que queremos convertirnos en un buen destino turístico. Esto le da entidad suficiente al estudio", subrayó Jesús Santacruz, director general de Astún.

 

A la presentación acudieron representantes de ambas estaciones de esquí, los empresarios del valle, todos los alcaldes excepto el de Jaca, así como representación del Aeródromo de Santa Cilia y de San Juan de la Peña, que también forman parte de la ATVA.

 

El encargo de este estudio a Ecosing, que ha trabajado en la unión de estaciones en Austria y Suiza o en el proyecto de Sochi, donde se celebrarán las Olimpiadas de 2014, es solo un primer paso. Son estudios de cómo podrían conectarse las estaciones, pero un avance "muy importante para el valle, que ha visto cómo la fuga de esquiadores va a más cada año", sobre todo desde la potente inversión en Formigal, según comentaron ayer .

 

Por eso se plantean ya una segunda fase: estudiar la unión de ambas con Formigal, que pertenece al grupo Aramón. Debido a las reticencias que podría levantar en algún sector, Sánchez adelantó que el proyecto que tienen en mente cumpliría con los 15 requisitos que se marcaron en la Mesa de la Montaña, que no quieren construcciones en alta montaña y que económicamente será viable. "No son las cifras astronómicas que se barajan en otros proyectos. La unión de las tres estaciones costaría entre 35 y 40 millones de euros, y nos podrían en primera línea de los destinos de nieve", concluyó. De plazos, sin embargo, no se habló, aunque uno de los presentes insistió en que un remonte "se monta en un verano".