Un rescate en realidad virtual

Una empresa aragonesa graba un auxilio en los Mallos de Riglos en 360 grados, para National Geographic, en el que el espectador se sumerge de lleno en la escena.

Rescate en camilla.
Un rescate en realidad virtual

Ver en vivo y en directo un rescate de montaña está al alcance de muy pocos: de los pilotos del helicóptero, de los socorristas, del médico o del propio accidentado. Pero gracias al trabajo realizado por una empresa aragonesa para National Geographic es más fácil conocer de cerca la experiencia.

Ábaco Digital rodó el pasado invierno un simulacro de rescate en los Mallos de Riglos utilizando tecnología de realidad virtual que permite interactuar al espectador. El vídeo, de 360 grados, lo publicó ayer National Geographic en su Facebook. En solo nueve horas tuvo 94.000 reproducciones en todo el mundo.

Hace tres años, esta productora ya hizo un trabajo similar con la Guardia Civil, pero cuando National Geographic se interesó por él decidió repetirlo utilizando la tecnologías más avanzadas. "Son vídeos inmersivos que ofrecen como novedad la interactividad. Se ve con el ordenador moviendo el ratón pero también se puede ver con gafas de realidad virtual, y en este caso la sensación es que estás ahí. En un formato tradicional tu solo observas lo que te están mostrando", explica Ignacio Ferrando, uno de los socios de Ábaco Digital y director de fotografía.

Un rescate en realidad virtual

Pinche aquí para ver la imagen en 360º

Para la grabación se utilizaron tres cámaras simultáneas (una fuera del helicóptero que manejaba desde dentro Ferrando, otra en el interior y otra en la pared rocosa), de forma que las imágenes ofrecen distintos puntos de vista. Se hizo el 21 de diciembre de 2016. No fue un rescate real, para no interferir el trabajo de los especialistas, y por ello se aprovechó un simulacro de accidente de un escalador. Eligieron para ello uno de los lugares más difíciles para trabajar con el helicóptero, el mallo del Puro, el más pequeño, con una cima minúscula y donde además resulta muy difícil maniobrar.

"Hay poco margen de error"

"Los apoyos en ese lugar son muy delicados, hay poco margen de error", comenta José Manuel García Valcárcel. Él y Jesús Roselló, miembros de la unidad aérea de la Guardia Civil con base en Huesca, eran los dos pilotos. La dificultad radicaba en la cercanía de las palas del rotor a la pared y en la escasa superficie de El Puro para posar el aparato.

La aeronave se acercó a la cima para dejar al médico del 061 y a un miembro de la unidad especial del Greim, un grupo que atiende rescates muy complicados o prueba el material nuevo. Ambos descendieron hasta donde se encontraba el herido y se quedaron colgados en una pared de vértigo junto con el accidentado. En una segunda aproximación, el helicóptero les llevó la camilla para colocar al lesionado, y la izó con ayuda de la grúa para su evacuación a un centro sanitario. "Es muy difícil imaginarse cómo es un rescate sin estar allí", señala García Valcárcel, quien cree que este vídeo, de poco más de 4 minutos, es un importante escaparate internacional sobre el trabajo de la Guardia Civil.

Un rescate en realidad virtual

Pinche aquí para ver la imagen en 360º

Con él coincide Ignacio Ferrando. "El hecho de que se pueda ver en cualquier parte del mundo permite difundir el servicio de los grupos de rescate y también paisajes como los Mallos de Riglos", comenta este especialista en foto y vídeo de 360 grados y realidad virtual, que ya trabajó para National Geographic hace unos meses en la Antártida y que acaba de volver de Bahamas.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión