Pomar despide unas fiestas pensadas para niños y mayores

Una traca de fuegos artificiales puso ayer el punto y final a unos días marcados por la diversión.

Los más pequeños disfrutaron con los juegos en la plaza.
Los más pequeños disfrutaron con los juegos en la plaza.
José Luis Pano

Los vecinos de Pomar de Cinca despidieron ayer sus fiestas en honor a Nuestra Señora de la Asunción con un guiño a sus vecinos de mayor edad. La pista de la casa de la cultura se convertirá a partir de las 20.00 en una sala de baile para el grupo Wonder Dance, que ofrecerá su espectáculo dirigido al público de la tercera edad. Al finalizar se servirá entre todos los asistentes un picoteo, y se entregarán los premios de los distintos concursos que se han desarrollado desde el día 12. Una traca de fuegos artificiales lanzados desde el centro social de La Sabina pondrá el broche colorista a la última jornada de fiestas.


Las fiestas de Pomar han tenido como tónica general una gran participación en todos los actos que programa el Ayuntamiento junto con una comisión formada por los quintos y varias asociaciones, así como voluntarios.


El espectáculo de Los Titiriteros de Binéfar, grupo que recaló en Pomar dentro del programa Estío Vivo, tuvo una gran aceptación entre los más pequeños. También fue un éxito el concurso de tortillas. Las más sabrosas fueron las que elaboraron Jesús Agúndez y Laura Foradada, que se llevaron sendos lotes de champán y vino.


Estas fiestas han servido para rendir homenaje a una de las personas más queridas de Pomar de Cinca, Julio Alegre. Vecino fallecido hace unos meses y que ha dejado gran huella en el club de fútbol local, así como en el tejido asociativo de la localidad. Otro protagonista de estos días ha sido Tomás Serna, que fue el encargado de leer el pregón.

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