EN LAS CORTES

Haciendo 'patria' con el coche oficial

La empresa de seguridad del Parlamento cambia los vehículos a los miembros de la Mesa y a los portavoces. Los Audi dan paso al Opel Insignia.

Uno de los nuevos coches oficiales Opel Insignia, aparcado en La Aljafería.
Haciendo 'patria' con el coche oficial
ESTHER CASAS

Los aros de Audi han dejado de poblar el aparcamiento de vehículos oficiales de La Aljafería. Los chóferes ya no aparcan los Audi A4. Opel ha logrado 'colarse' en el parque de vehículos de representación de las Cortes. Hace apenas unas semanas, los cinco portavoces del Parlamento aragonés y los miembros de la Mesa de las Cortes estrenaron coche oficial: un Opel Insignia negro.

Aunque el modelo no se fabrica en la planta de Figueruelas (habrían tenido que optar por un Corsa o Meriva), el Parlamento se ha inclinado por este modelo como "un gesto" hacia la factoría aragonesa, que atraviesa uno de los momentos más difíciles. No en vano, los coches oficiales siempre se convierten en privilegiados escaparates de las principales marcas de automoción. A este objetivo, con el que coinciden los 'inquilinos' de los coches, se une otro relacionado con los momentos de crisis económica actuales. "En tiempos difíciles, no hay que hacer ostentación", argumentan fuentes de las Cortes. Y, aunque es uno de los coches de gama alta de Opel, no alcanza el estatus de los Audi. De hecho, esta última era una de las marcas que se daba como opción junto a un Volkswagen Passat.

"Es cómodo", comenta uno de los que viajan habitualmente en el nuevo coche. "Los Audi siempre han tenido fama de ser muy seguros, pero este yo creo que tiene unas prestaciones muy similares", opina otro de los viajeros. La contrata de seguridad de las Cortes introdujo como una de las mejoras la renovación del parque móvil, por lo que el coste se incluye en la adjudicación de este servicio. El Parlamento no tiene que afrontar este gasto adicional.

Con este modelo, Opel entra a formar parte de las marcas utilizadas para coches oficiales. Hasta ahora, siempre se había apostado por Audi, Peugeot o Volkswagen. El presidente de Aragón, Marcelino Iglesias; el presidente de las Cortes, Francisco Pina; y el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, se desplaza en un Audi A8. Los doce consejeros del Gobierno de Aragón, sin embargo, viajan en Peugeot. En concreto, utilizan el modelo de alta gama 607 HDI y 204 caballos.

Pero el Opel Insignia no es la primera vez que sirve de medio de transporte de un cargo político de la Comunidad. Hace apenas un año, el consejero de Economía y Hacienda, Alberto Larraz, sorprendió llegando a la planta de GM en Figueruelas a bordo de un Opel Insignia. Llamó la atención porque él suele trasladarse en un coche de otra marca.

Pero en ese momento, en el que el conflicto de Opel se encontraba en plena ebullición, no lo hizo para quedar bien, como apuntaron desde el Gobierno aragonés. Su vehículo habitual estaba estropeado y el Insignia era un coche de sustitución. Desde el Ejecutivo aragonés recalcaron entonces que desde hace años Opel no cuenta con vehículos de representación de los que utilizan políticos del rango de Iglesias o del de sus consejeros. No obstante, el Ayuntamiento de Zaragoza, por ejemplo, sí tiene en propiedad algunos Opel Vectra.