PSOE

Fiesta socialista entre nubarrones

No corren buenos tiempos para el Gobierno de Zapatero y eso se notó ayer en una fiesta socialista que resultó algo forzada en los momentos de máxima exaltación. Novedades como las conexiones por televisión con el 'backstage', antes de que salieran a escena algunos de los candidatos como Leire Pajín, Juan Alberto Belloch, el alcalde de Huesca, Luis Felipe, o la candidata para Teruel, Mayte Pérez, resultaron llamativas, aunque fue inevitable el recuerdo de la moda de los programas televisivos del corazón, que siguen a sus invitados y sus trifulcas más allá del plató televisivo.


Como marca el guión, el público se mostró entregado, aunque no había mucha gente joven en la sala Multiusos del Auditorio de Zaragoza. La mayoría, unas 1.500 personas, eran de mediana edad o más, aunque agitaban las banderas del PSOE con la energía de un veinteañero.


Zapatero fue quien tuvo más interrupciones durante su discurso, que se prolongó durante 45 minutos. "¡No te acojones!" le espetó alguien cuando hablaba de la responsabilidad del Gobierno para llevar acabo la reforma laboral. "Dale caña a Rajoy", le gritaron cuando parecía que no se iba a referir al líder de la oposición. "Me había olvidado completamente de Rajoy", aseguró Zapatero entre las risas de los asistentes. El presidente del Gobierno pareció cómodo en todo momento. Elogió la "tenacidad" de los aragoneses y se sonrió cuando alguien del público, menos políticamente correcto, le dijo que había que ser "tozudo". "Vamos a dejarlo en tenacidad", dijo. También Eva Almunia, al empezar su intervención, tuvo que escuchar un sonoro "y mujeres" cuando hablaba de "hombres y mujeres". "Sí, sí y mujeres", recalcó ella, en una referencia a su condición que recuperaría más adelante en su discurso. Incluso se oyeron algunos gritos de "presidenta, presidenta".


Pese a la afluencia de público, fue fácil distinguir a cargos destacados, entre ellos el presidente de las Cortes, Francisco Pina, consejeros y diputados socialistas, el diputado nacional Jesús Membrado y algunos 'ex' ilustres como el que fuera presidente de la Comunidad, Santiago Marraco o el mucho más reciente ex alcalde de Huesca, Fernando Elboj. También estuvo el que fuera viceconsejero de Obras Públicas Carlos Escó, que no quiso perderse la presentación 'en sociedad' de su esposa, Eva Almunia, así como su hija. Y no faltó Mari Cruz Soriano, la esposa de Belloch, que por cierto se autodefinió como "telonero" del acto.


Hubo además expresiones de solidaridad con los mineros de Teruel y sentidas referencias entre aplausos a José Antonio Labordeta. El propio Zapatero se extendió en su recuerdo y lo calificó de "amigo" y de "aragonés auténtico".