Rudi: "Si la papeleta va a los minoritarios, no se sabrá qué va a ser de ella"

¿Qué le está pasando al PP? ¿Hay una crisis del bipartidismo?

Las encuestas están teniendo bastantes interrogantes, especialmente por el porcentaje tan elevado de indecisos que plantean. Yo creo que no es así y que hay mucho más voto decidido. Además, hasta ahora en Aragón éramos cinco las fuerzas con representación en las Cortes. Ahora va a haber más, así que lógicamente hay que repartir escaños. Pero hay también otras cosas claras: las encuestas coinciden en que el PP va a ser el partido más votado y que habrá un bloque de izquierdas, que no va a sumar más de 34 diputados.

Las encuestas también dicen que hay cierto rechazo hacia el PP, principalmente por la corrupción.

Siempre hay desgaste cuando se está en el gobierno. Lo sorprendente de las encuestas es que el PSOE, que en casi toda España está en la oposición, tenga el mismo o más desgaste que el PP. Los casos de corrupción afectan, pero además hemos vivido la más grave y profunda crisis económica.

¿Se siente cómoda con la respuesta que ha dado su partido sobre la corrupción?

Sí, se ha depurado lo que se tenía que depurar, los asuntos están en manos de los tribunales y las instituciones del Estado han funcionado. Dicho esto, claro que ha hecho daño. Y no me canso de repetir que en Aragón, el PP no ha tenido ningún caso de corrupción. Nuestras manos están muy limpias.

Transparencia, renovación y regeneración son palabras que se están repitiendo de forma muy intensa. ¿El PP-Aragón ha aplicado esa clave de renovación interna?

Hice ya una profunda renovación en 2011. Ahora, en cuanto a personas, he hecho muchos menos cambios. Hay que renovar lo que no ha funcionado, pero ¿por qué hay que renovar lo que sí ha funcionado?

Se ha establecido un debate entre lo nuevo y lo viejo. ¿Se ha visto interpelada por esa voluntad de cambio?

No. Ni todo lo nuevo por ser nuevo es bueno, ni todo lo viejo por ser viejo es malo. Cuando conformo equipos, no miro si es hombre o mujer, ni su edad, ni otras condiciones. Sí miro su preparación, su capacidad, que su actitud sea adecuada para el puesto. Se ha originado un debate superficial.

Otros partidos han optado por el modelo de primarias para elegir a sus candidatos, mientras el PP entiende que no es un modelo válido. ¿Se plantearía aplicarlas?

Los modelos en sí mismos no son ni buenos ni malos, depende de cómo se apliquen. Hay un partido que ha aplicado un modelo de primarias con un límite de avales tan elevado en alguna comunidad que nadie pudo concurrir; evidentemente no tiene las mejores garantías democráticas. Nosotros tenemos un sistema que hasta ahora ha funcionado. Con muy pocos avales, cualquier afiliado se puede presentar a un congreso del PP. No es menos democrático que el de otros partidos.

La oposición le critica a usted por el sueldo que recibe del PP.

Con las retribuciones de los cargos políticos se puede hacer mucha demagogia. Cuando se desarrollan dos actividades, en una hay un complemento por actividad dedicada. Es el de personas que dedican su tiempo a diferentes instituciones y al partido. Lo normal es que en función de las responsabilidades que cada uno ejerce haya una compensación económica y ese es el modelo que tenemos en el PP. También los diputados en el Parlamento tienen una compensación según la responsabilidad.

También ha generado muchas críticas el incumplimiento del déficit.

En 2010, que fue el último ejercicio que cerró el gobierno del PSOE, el déficit público de Aragón fue de más de 990 millones. Es un 2,9% del PIB. En 2014, último ejercicio cerrado por mi gobierno, el déficit ha sido de 551 millones. Es un 1,66% sobre el PIB. En una etapa de caída de ingresos brutal, lo hemos rebajado en un 44%. Esas son las cifras reales.

Pero usted esperaba datos mejores y que el trabajo hecho quizá hubiera tenido otro resultado.

No, el trabajo realizado ha tenido para mí un estupendo resultado. Aragón ha subido posiciones en todos los indicadores comparativos con otras Comunidades. Yo estaba dispuesta a avanzar en la senda de la consolidación fiscal y a cumplir, pero con un límite. No estaba dispuesta a cerrar una consulta médica, ni consultorios en zonas rurales, ni un aula rural mientras hubiera cinco niños, ni un ala de hospital. Ese ha sido el límite.

En un gobierno tan estable como el suyo ha tenido tres consejeros de Hacienda. Ha sido la pieza más inestable de ese gobierno.

La marcha del primero fue una decisión personal, que él tomó cuando se ganan las elecciones generales. Yo no tengo la costumbre de atar a nadie de mis equipos y a él le surgió la posibilidad de marcharse y se marchó. El segundo decidió con una gran generosidad que se marchaba, como consecuencia de cerrar el ejercicio de 2013 con más déficit que el que se preveía. Yo le acepté la dimisión.

Hablemos de la noche electoral, ¿Qué sería un buen resultado y qué sería un mal resultado?

No voy a cuantificar. Llevo durante mucho tiempo rindiendo cuentas y diciendo lo que quiero seguir haciendo. Los aragoneses tendrán que pensar qué opciones tienen. La receta del bloque de izquierdas es subir impuestos, crear una ecotasa, no hacer el Pacto del Agua, no seguir apoyando Motorland, parar el proyecto de unión de las estaciones de esquí. Por otro lado, está el proyecto que lidera el PP. Ofrecemos seguridad, responsabilidad, estabilidad y desarrollo. Los aragoneses tendrán que decir cuál de estas dos opciones apoya, porque si su papeleta va dirigida a partidos minoritarios, lo que no sabe es qué va a pasar con ella.

¿Y el PP, con quién pactaría?

Yo pacto con los aragoneses. Mi proyecto es de centro, moderado, que busca seguir avanzando en las reformas y apoyar la actividad económica, que piensa en las personas y que es adecuado a la composición territorial y de la población de Aragón. No todo vale para todos los sitios. Tras las elecciones habrá un pacto con proyectos políticos, y para cerrarlo no es lo mismo tener más o menos apoyo.

¿Habrá pactos distintos en un ayuntamiento que en las Cortes?

Los pactos se hacen en función de las mayorías y de los proyectos políticos. El proyecto político del candidato para el Ayuntamiento de Zaragoza, Eloy Suárez, es coincidente con el que yo estoy planteando para el conjunto de Aragón.

¿Se plantearía dimitir si no se logra conformar esa mayoría?

No me planteo escenarios que no creo que se produzcan.

¿Quiere mandar un último mensaje electoral?

Va dirigido a todos los aragoneses, pidiéndoles que simplemente mediten dónde estábamos en 2011 y hacia dónde íbamos. 45 aragoneses se iban al paro cada día. En estos momentos, cada día más de 30 aragoneses encuentran un puesto de trabajo. Les ofrezco continuar trabajando en la misma dirección que lo he hecho estos cuatro años y, si cabe, con más ilusión y ganas todavía, porque la peor etapa para Aragón y para España ya está pasada.